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Tercera negativa a la libertad condicional para Carlos Fabra

El centro de inserción donde el exlíder del PP cumple el tercer grado y la Fiscalía rechazan la solicitud

Carlos Fabra.
Carlos Fabra. Marti Domenech

A la espera de lo que decida el juez, por el momento no habrá libertad condicional para el expresidente de la Diputación de Castellón y exlíder del PP provincial, Carlos Fabra. Y ya van tres informes desfavorables en menos de un año, el tiempo que lleva cumpliendo su condena en régimen de tercer grado.

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La última solicitud de Fabra para obtener el régimen de libertad condicional se produce cuando ha cumplido tres cuartas partes de la condena a cuatro años de cárcel y al pago de una multa de 1,4 millones de euros por defraudar 700.000 euros a la Hacienda Pública.

La solicitud se ha topado ahora con la negativa tanto de la junta de tratamiento del Centro de Inserción Social Victoria Kent, donde pernocta de lunes a jueves desde el pasado mes de abril, cuando le fue concedido el tercer grado, como de la Fiscalía Anticorrupción. Ésta justifica su informe desfavorable a la petición, como en las dos ocasiones anteriores, en el hecho de que Carlos Fabra “no ha hecho frente a la responsabilidad económica derivada de su actuación delictiva”, según fuentes penitenciarias consultadas por EL PAÍS. En concreto, se refiere a los más de 300.000 euros que suman los intereses de dicho montante y que siguen sin abonarse, han señalado por su parte fuentes judiciales.

Por otro lado, el rechazo de la Junta de Tratamiento del Victoria Kent a la petición de Fabra ha sido esta vez algo más laxa que en las dos ocasiones anteriores. La solicitud ha sido denegada por mayoría –tres votos en contra y dos a favor- y no por unanimidad como sí ocurrió en las dos primeras veces.

Fabra ingresó en la prisión madrileña de Aranjuez en diciembre de 2014. Menos de un año y medio después, en abril de 2016, obtuvo el tercer grado por parte de la magistrada del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 3 de Madrid, confirmado después por la Audiencia Provincial de Castellón. Ingresó en el centro Victoria Kent, al que sólo acude para dormir de lunes a jueves. La juez valoró, además de la edad de Fabra –más de 70 años- y su bajo riesgo de reincidencia, que el interno había evolucionado favorablemente, que había abonado su responsabilidad civil y que su condena era corta. No obstante, la concesión del régimen de semilibertad se produjo contra el criterio de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias y de la Junta de Tratamiento de la prisión de Aranjuez.

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Con posterioridad a su ingreso en el Victoria Kent, y según fuentes judiciales, Fabra ha pedido en dos ocasiones la libertad condicional. La primera al cumplir los dos tercios de condena y la segunda apelando a su condición de “septuagenario” y al hecho de “estar enfermo”. En las dos ocasiones la Junta de Tratamiento del centro ha dictado un “pronóstico desfavorable por unanimidad” en contra de su libertad condicional, según fuentes consultadas por EL PAÍS. Tampoco favorable ha sido la respuesta de la Fiscalía Anticorrupción. Tras los informes negativos de ambos organismos emitidos en los últimos meses ha habido resolución del magistrado del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 1 de Madrid por la cual se le denegaba la solicitud de libertad. El mismo juez deberá determinar ahora, por tercera vez, si otorga o no la libertad condicional a Carlos Fabra.

En pleno cumplimiento de su condena, el exlíder del PP provincial ha sido citado judicialmente en lo que va de año hasta en dos ocasiones. El pasado 31 de enero fue llamado a declarar por el Juzgado de Instrucción 3 de Castellón como investigado por un presunto delito de cohecho en un patrocinio del aeropuerto de Vilanova-Benlloch. El expresidente de la Diputación castellonense se acogió a su derecho a no declarar. Un mes después, el 27 de febrero, Fabra volvía a la Ciudad de la Justicia de la capital de La Plana para declarar como investigado por un presunto delito societario en el Club de Campo del Mediterráneo de Borriol, del que fue presidente.

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