_
_
_
_
_

El tripartito de Alicante aprueba los presupuestos con la abstención de dos tránsfugas

El alcalde Echávarri asegura que son los "más sociales" de la historia

El alcalde de Alicante conversa con bomberos y policías locales frente a un parque inundado durante el pasado temporal.
El alcalde de Alicante conversa con bomberos y policías locales frente a un parque inundado durante el pasado temporal. MORELL (EFE)

El tripartito de izquierdas que gobierna Alicante, compuesto por Guanyar, Compromís y PSPV, ha logrado aprobar este miércoles los presupuestos municipales para 2017. Lo ha hecho gracias a las abstenciones de dos concejales tránsfugas, Fernando Sepulcre, ex de Ciudadanos, y Nerea Belmonte, expulsada de Guanyar. Las cuentas elaboradas por la concejal de Hacienda, la socialista Sofía Morales, ascienden a 243.882.176 euros sin contar con los organismos locales que son autónomos, un 0,9% menos que el ejercicio anterior, y han tenido que pasar la supervisión del ministerio de Hacienda, que tiene intervenida la corporación desde 2012.

Más información
El gobierno municipal de Alicante respalda el presupuesto sin fisuras
La edil de Guanyar Alacant Nerea Belmonte se niega a dimitir

Los trece votos del equipo de gobierno y las abstenciones de los ediles no adscritos han bastado para imponerse al rechazo de PP y C's (ocho y cinco ediles, respectivamente), que han arremetido contra el tripartito por su "falta de diálogo" y sus enfrentamientos internos.

La incógnita se ha mantenido hasta el último minuto. Uno de los socios de gobierno, Guanyar Alacant (Podemos y EU), había amagado incluso los días previos con un voto contrario. Finalmente, durante una asamblea celebrada la noche del martes, los militantes de esta coalición acordaron respaldar el proyecto siempre y cuando el alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, se comprometiera a que la primera modificación de crédito fuera destinado a la concejalía de Acción Social, que dirige la edil de Guanyar Julia Angulo. Y Echávarri ha cumplido con el guion previsto durante el pleno extraordinario. No porque fuera su compromiso, o porque haya cedido al "chantaje" de sus socios de gobierno, como sostiene el PP, sino porque la respuesta a las necesidades en gasto social está en su "ADN", ha dicho.

Durante su discurso, el alcalde ha parafraseado a Mariano Rajoy para asegurar que estos son los presupuestos "más difíciles de la democracia", pero eran "los únicos posibles" y se han convertido en los "más sociales de la historia". "Los ajustes que contienen no se han hecho ni por capricho ni por ocurrencias", ha añadido.

Echávarri ha recordado que el ayuntamiento está intervenido por el ministerio de Hacienda, que reduce a un máximo de diez millones las inversiones y limita la oferta pública de empleo. Buena parte de la intervención del primer edil se ha centrado en la herencia recibida de los sucesivos gobiernos del PP. Una gestión que ha calificado de "ruinosa, nefasta y vergonzosa" desde 1995 y que obligó al Gobierno central a para "parar las manos" a los populares para evitar que siguieran con "sus políticas de fiestas, yates y marisquito".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El alcalde ha presumido de la reducción de la deuda que ha logrado el tripartito en dos años, de los 131 millones que había dejado el PP en junio de 2015 a los 81 que se adeudarán el 30 de junio de este año. También ha realizado diversos anuncios, como el refuerzo de personal en el área de urbanismo, la creación de una oficina antifraude y de fiscalización de ingresos y gastos dirigida por el concejal de Presidencia, Natxo Bellido, la posible salida de la ciudad de la Mancomunidad de Municipios de la comarca de L'Alacantí o la recuperación de la fase ejecutiva de la recaudación de impuestos, que actualmente desarrolla la entidad dependiente de la Diputación Suma, entre otros.

El pleno ha discurrido por los cauces habituales: constantes rifirrafes dialécticos entre los grupos de izquierda y los de la oposición. Luis Barcala, portavoz del PP, ha calificado de "mediocre" la propuesta y ha asegurado que solo "responden a las desavenencias" entre los socios de gobierno."El tripartito está muerto y con estos presupuestos van a acabar de enterrarlo. Son una burla y una OPA hostil a las personas que más lo necesitan", ha apuntado el líder de los populares. La representante de C's, por su parte, Yaneth Giraldo, ha criticado que las cuentas no hayan sido consensuadas, estén confeccionadas "a retales" y no contengan el "mínimo indicio de generación de crecimiento y riqueza" en la ciudad.

Los líderes de Compromís, Natxo Bellido, y Guanyar, Miguel Ángel Pavón, en cambio, han acusado a los dos grupos de oposición de tratar de bloquear el "proyecto estrella" de esta legislatura, una iniciativa de recuperación integral del entorno de los castillos de Santa Bárbara y San Fernando, que cuenta con fondos europeos y a la que la corporación va a destinar tres millones y han lamentado el "corsé asfixiante" con el que el ministerio de Hacienda "estrangula a la ciudad".

Las cuentas, que destinan 91,2 millones al capítulo de recursos humanos; 26, 1 a tráfico, transportes y movilidad; 26,1 a seguridad y 9,1 a servicios sociales han contado también con la oposición de la sección municipal de CC. OO. "Un gobierno de izquierdas no lo es solo por estatutos, sino por su acción política, porque cumple con sus compromisos y no defrauda a quienes le apoyaron", ha proclamado en el pleno un portavoz del sindicato.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_