La Diputación insta a Catalunya Caixa a pagar las preferentes

La Diputación de Barcelona aprobó ayer una declaración, firmada por todos los grupos, en la que reclama a CatalunyaCaixa que devuelva el dinero a las familias que han invertido en participaciones preferentes. La moción, impulsada por los grupos de Iniciativa y el Partit dels Socialistes, fue aprobada finalmente por unanimidad. El texto reclama que "se priorice la recuperación de los ahorros por parte de las familias afectadas" por estos productos financieros.

Las participaciones preferentes son deuda perpetua que bancos y cajas vendieron entre clientes minoristas. Los cambios regulatorios que introdujo en el sector la normativa Basilea III implicaron que dejara de computar como capital de máxima calidad, por lo que las entidades empezaron a buscar fórmulas para rescatarlas.

CatalunyaCaixa evitó ayer concretar qué cantidad de dinero está consignado en participaciones preferentes, aunque un portavoz subrayó que es de las entidades que menos participaciones tienen. La entidad dejó en marzo de pagar el cupón trimestral y mensual que ofrecía su producto, dada la situación económica de la caja, nacionalizada por el Estado y a la espera que el Banco de España la adjudique, previsiblemente, antes de verano. La Diputación de Barcelona solo mantiene una posición simbólica en la caja, como fundadora de una de sus entidades embrionarias, Caixa de Catalunya.

La declaración leída en el pleno va más allá de las participaciones preferentes y plantea siete peticiones a la entidad, que giran en torno a la necesidad de mantener la vocación social que había caracterizado a la caja. En este sentido, la declaración reclama mantener la vocación de apoyo al ahorro de las familias, que se mantenga el compromiso con la Obra Social y el apoyo al mundo local, que permite financiación a la Diputación y a otros entes locales. El texto también se refiere a la futura adjudicación de CatalunyaCaixa. Reclama que la entidad que asuma la gestión de la caja mantenga las buenas prácticas hipotecarias, se incluyan garantías para los trabajadores y aportaciones económicas para la futura Fundación CatalunyaCaixa. La Diputación quiere que en la nueva realidad jurídica de la entidad se reconozca el papel de las fundadoras públicas en la obra social.