Navalcarnero seguirá endeudado 80 años más
El equipo municipal denuncia que la gestión del exalcalde conservador Baltasar Santos dejó al municipio con más de 200 millones de deuda
El Ayuntamiento de Navalcarnero, dirigido por José Luis Adell (PSOE) en coalición con Cambiemos Navalcarnero y un concejal independiente, recurrirá al Tribunal de Cuentas para aclarar sus números. La anterior corporación, dirigida, desde 1995 hasta 2015, por Baltasar Santos (PP), dejó de presentar las cuentas del Consistorio en 2008. Tras las pasadas elecciones municipales, el PSOE denunció una deuda heredada de 217 millones de euros. “Cuando se terminen de auditar todas las facturas habrá entre 25 y 30 millones más de deuda. Seremos el pueblo más endeudado de España, al menos durante 80 años”, afirma Adell.
Un aviso de la Cámara de Cuentas alertó al Ayuntamiento de Navalcarnero el pasado mes de abril: según un informe de la Comunidad de Madrid, la localidad no había aportado el balance de sus cuentas (una declaración obligatoria para todos los municipios) de 2013. Al parecer, el anterior alcalde, Baltasar Santos (PP), ya había recibido dos notificaciones instándole a que remitiera dicha documentación. No lo hizo. Pero no era la primera vez: el Ayuntamiento de Navalcarnero llevaba sin presentar su balance de cuentas a la Comunidad desde 2008.
“En 2013, según los informes del Consistorio, la deuda total del municipio superaba los 44 millones [44.080.952 euros]”, cuentan desde el Ayuntamiento. “Pero, en realidad, era mucho más”, denuncia el actual alcalde. En función de las cuentas que han realizado, la localidad, con una población aproximada de 25.000 habitantes, tiene una deuda que supera los 217 millones de euros.
El actual equipo de Gobierno no entiende que la deuda se haya disparado de esta manera. “Durante la etapa de Santos se vendieron varias parcelas públicas mientras que otras fueron adjudicadas a través de concesiones. ¿Dónde se ha ido todo ese dinero?”, se pregunta el actual alcalde José Luis Adell (PSOE).
"De Baltasar Santos no sabemos nada"
Baltasar Santos, anterior alcalde de la localidad por el Partido Popular, se presentó en las pasadas elecciones de 2015 por el partido independiente Unión Reformista Ciudadana (URCi), tras ser expulsado del PP a mes y medio de las elecciones del 24 de mayo del año pasado.
En esos comicios, Santos obtuvo dos ediles (la anterior legislatura gobernó con 12 bajo las siglas de los populares) mientras que el PSOE fue el partido más votado, logró siete concejales. El PP obtuvo cinco; Cambiemos Navalcarnero, cuatro; Ciudadanos, tres; y el Partido Democrático Popular, uno.
El actual alcalde, José Luis Adell, afirma que los dos concejales de URCi nunca recogieron el acta y después dimitieron: "No hemos sabido nada más de Santos, pero está imputado en tres causas así habrá noticias suyas".
El historial de Santos puede responder a la pregunta del socialista: las cuevas de mentirijilla que Santos quiso hacer para la localidad, gastando más de 30 millones de euros y ganándose una imputación por “fraude de ley”; la inversión de más de 10 millones de euros en 150 cruces de granito o un sobrecoste de 1.860% en las obras de rehabilitación del casco histórico, que pasaron de 586.000 euros a 11,5 millones. Al contrario que su predecesor, al descubrir la situación económica del municipio, Adell sí que se dirigió a la Cámara de Cuentas: “La buscamos y remitimos toda la documentación atrasada”. En esa búsqueda de documentos, el equipo socialista asegura que encontró varias operaciones sospechosas de irregularidades: la concesión del cementerio y del tanatorio; la construcción y concesión de la Plaza de Toros; y varios contratos, “que actualmente están siendo investigados por los tribunales”, como el Polideportivo de la Estación. De hecho, el exalcalde Baltasar Santos está imputado en tres causas.
‘Deplorable gestión’ del PP
Desde que el actual alcalde tomara el poder, Navalcarnero ha pedido ayuda al Gobierno adhiriéndose a los fondos de ordenación del Ministerio de Hacienda que les ha permitido refinanciar 101 millones de euros de su deuda. “Hemos hecho un plan de ajuste, no gastamos más de lo que ingresamos y hemos planteado un pago de la deuda a largo plazo, de unos 70 u 80 años”, explica Adell.
Por otro lado, la Comunidad de Madrid tenía congeladas las subvenciones a Navalcarnero por un impago de 2,8 millones de euros. Para desatascar esa situación, el portavoz del grupo socialista en la Asamblea de Madrid, Ángel Gabilondo, visitó la localidad el pasado noviembre y pidió a la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes (PP), un plan especial para sacar a Navalcarnero del “bloqueo económico y social”. La Comunidad cedió y aplazó el pago: “Este aplazamiento ha facilitado que las escuelas infantiles o las residencias de mayores puedan seguir funcionando”, explican desde el Ayuntamiento.
“Ante tanta mala noticia e insensatez he encontrado una buena noticia: en Navalcarnero existe un equipo de Gobierno dispuesto no solo a esclarecer lo sucedido, sino a trabajar por resolver los problemas de los ciudadanos del municipio”, defendió Gabilondo durante su visita.
El Consistorio ha creado una comisión de investigación para analizar “la deplorable gestión del Partido Popular”. Además, han contratado una dirección jurídica para que se puedan judicializar todos aquellos contratos en las que haya cualquier indicio de delito. A pesar de esos esfuerzos, parece que a Navalcarnero le queda deuda para rato.
