Puigdemont solicita una entrevista con Rajoy

La oficina de Presidencia de la Generalitat se puso ayer en contacto con La Moncloa para concertar una entrevista entre el president Carles Puigdemont y Mariano Rajoy, presidente en funciones, ue no han mantenido ninguna reunión desde que el primero fue investido el pasado 10 de enero. La consejera portavoz del Ejecutivo catalán, Neus Munté, admitió que la iniciativa partió desde la Generalitat para dejar constancia de su “absoluta disposición al diálogo” y para acabar con las "especulaciones" que apuntan a que no están abiertos a la negociación.

El Gobierno catalán remitió ayer un correo electrónico pidiendo la entrevista, según fuentes de La Moncloa. En declaraciones tras el Consejo Ejecutivo, Munté admitió los contactos pero admitió que la entrevista no está concertada. “La mejor prueba de nuestro carácter dialogante es que por aquí han pasado Pablo Iglesias y Pedro Sánchez. Y Albert Rivera lo hará este viernes”, expuso la consejera asegurando que nunca han excluido a Rajoy de esa voluntad de negociar. Pese a todo, le reprochó que no hiciera el “más mínimo gesto de cortesía” para felicitar a Puigdemont tras ser investido. O que tampoco hiciera el menor gesto de acercamiento cuando ha visitado Barcelona por actos institucionales o de partido, como el de pasado sábado.

Puigdemont era hasta ahora partidario de aguardar al desenlace de las negociaciones de la investidura para pedir la cita oficial. La situación se había encallado al estar dolido el president por la falta de cortesía institucional de Rajoy al no felicitarle por su nombramiento mientras eoipoiretren La Moncloa entendía que debía ser la Generalitat la que informara del relevo y solicitara el encuentro. Munté negó que la petición no implica en absoluto que estén dando marcha atrás o que hayan surgido elementos que propicien el encuentro.

La Generalitat aguardaba ayer la respuesta y está dispuesta a que la entrevista se celebre en Madrid. El objetivo es que el encuentro no sea meramente formal sino que tenga contenido ante los diversos problemas que acucian a la Generalitat como el objetivo del déficit. El 30 de marzo, Rajoy vaticinó que la reunión se celebraría. “Creo que nos veremos. Creo que es bueno que tengamos una conversación en términos razonables”, dijo.