La oposición presiona a Colau para que aporte fondos a la línea 10
ERC dice que no votará sus presupuestos si no prevén una partida para el metro de la Zona Franca
Los grupos municipales de CiU, la CUP y sobre todo ERC, presionaron ayer a la alcaldesa Ada Colau para que el Ayuntamiento aporte fondos para reanudar las obras de la L10, el metro que debe llegar a la Zona Franca y cuyos trabajos dijo la Generalitat que comenzarán de nuevo en dos semanas.
En vísperas a la reunión entre Colau y el presidente Carles Puigdemont, prevista para hoy, ERC condicionó su apoyo al presupuesto municipal la que contemple una partida para el metro. CiU dijo que ir de la mano permitiría abrir más estaciones; Ciutadans y PSC pidieron que se pacten las aportaciones y un calendario. Solo el PP recordó que es una obra que debía financiar la Generalitat.
La reunión entre la alcaldesa y el presidente está prevista a partir de las 10.30 horas y llega en un clima enrarecido por el anuncio del consejero de Territorio, Josep Rull, de reinicio de las obras del metro a la Zona Franca el próximo día 15. Este era uno de los grandes temas que Colau quería tratar con Puigdemont, en un encuentro quiere que sea productivo y en cuyos gabinetes llevan días trabajando.
La reclamación de la deuda de la Generalitat con el Ayuntamiento (140 millones en diciembre pasado), el Tranvía, la caída de las aportaciones del gobierno catalán en los consorcios (como el de educación), o la Ley de Barrios serán otros temas que la alcaldesa quiere tratar con Puigdemont.