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La tensión entre Botella y Aguirre llega a los mítines

La alcaldesa de Madrid y la candidata escenifican su falta de sintonía

F. Javier Barroso
Aguirre, Aznar, Cifuentes, Botella  en el acto en Madrid Rio
Aguirre, Aznar, Cifuentes, Botella en el acto en Madrid RioClaudio Álvarez

La tensión entre la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y quien aspira a relevarla, Esperanza Aguirre, volvió a evidenciarse en el acto de campaña que las unió este domingo en Madrid Río. Aguirre plantó el viernes a la regidora en su despedida oficial en el Ayuntamiento, y esta no ahorró indirectas en su discurso final. Pero este domingo no. Su guante lo recogió su marido, el expresidente José María Aznar, quien le agradeció haber dejado “un legado como nadie” y aseguró que habían pasado “cosas, muchas, ingratas e injustas”. Aguirre, comedida, no criticó a Botella.

Meses de constantes encontronazos

Noviembre de 2012. Aguirre pide responsabilidades a Botella por el Madrid Arena. "Caiga quien caiga". Se especula que quiere relevarla en 2015.

Marzo de 2013. La expresidenta regional alaba ahora que Botella diera "la cara" en la tragedia del Madrid Arena.

Septiembre de 2013. Aguirre asegura: "A todo el mundo le gusta ser alcalde, pero no está en mis planes". Aunque en un periódico, al mismo tiempo, sostiene que ni confirma ni desmiente esta posibilidad.

9 de septiembre de 2014. Botella renuncia a presentarse a las elecciones municipales.

30 de abril. Aguirre dice que no va a restringir el tráfico del centro —como preveía Botella—, que había calificado de "bolchevique".

10 de mayo. La alcaldesa afirma en EL PAÍS: "Me dolió muchísimo que Esperanza Aguirre relegara a mi gente".

11 de mayo. Aguirre echa en cara a Botella que llamase al presidente Rajoy para cambiar la lista electoral.

13 de mayo. Aguirre, Cristina Cifuentes y el presidente Mariano Rajoy montan en bici por Madrid Río. Ni rastro de Botella, que ha puesto en marcha el servicio público municipal.

15 de mayo. Aguirre planta a Botella, José María Aznar y Soraya Sáenz de Santamaría en el adiós de la regidora. Se pasea por la pradera de San Isidro donde es aplaudida y abucheada.

17 de mayo. Ayer ambas políticas coinciden en un mitin en Madrid en presencia de Aznar.

Las fricciones entre Esperanza Aguirre y Ana Botella tienen su origen en las declaraciones de la primera pidiendo explicaciones por la tragedia del Madrid Arena en noviembre de 2012, cuando cinco chicas murieron aprisionadas. La presión siguió aumentando entre ambas cuando Aguirre afirmó que Madrid estaba sucio o que la intención de Botella de cerrar al tráfico el centro de la capital era una medida “bolchevique”. Pero el cénit acaeció hace una semana cuando en una entrevista en EL PAÍS Botella afirmó: “Me dolió muchísimo que Esperanza Aguirre relegara a mi gente”. Se refería a las listas electorales.

Aguirre no tardó en contestar echando a la regidora en cara que hubiese llamado al presidente Mariano Rajoy para cambiar el listado: “Ella sabrá lo que hizo. Aquí no hay equipos de nadie, el equipo es el PP”.

El expresidente José María Aznar se colocó ayer en la silla que separaba a su mujer y a Aguirre. Un retrato muy gráfico del distanciamiento. Ambas apenas se cruzaron miradas, junto a Cristina Cifuentes como testigo. La candidata a la Comunidad mantiene, asimismo, diferencias con Aguirre, que se evidencian en sus declaraciones y posicionamientos. Llegó a decir: “Mi lista no la he hecho yo”.

Aguirre se acercó ayer al mitin andando con sus colaboradores y coincidió con la llegada del coche oficial del expresidente Aznar, que iba acompañado de su mujer. Aznar saludó a la ex presidenta regional y agradeció la llegada efusiva de muchos simpatizantes. La alcaldesa se limitó a dar un par de besos a la aspirante y a caminar junto a su marido. “Se notan los cuchillos en el ambiente y las puñaladas que se están cruzando”, comentaron dos colaboradores de la alcaldesa y de la candidata de PP.

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Aguirre arrancó su discurso tratando a la actual regidora como “querida Ana” y la felicitó —junto a otros antecesores del PP en el Ayuntamiento— por su “labor extraordinaria”. Bajo el escenario, mirada sin gestos de la alcaldesa. Ni siguiera tuvo una mínima reacción cuando Aguirre alabó la reducción de la deuda y del gasto corriente en estos dos últimos años.

Aznar no escatimó buenas palabras para la gestión de su mujer al frente del Consistorio ante las 1.500 personas congregadas: “Ha sido el mejor ejemplo de compromiso con el proyecto necesario que necesita España”.

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Botella, por su parte, no hizo referencia a su posible sustituta, que lidera las encuestas con un 29,7% de intención de voto y 19 concejales. Lo que si elogió es que se eligiese el parque Madrid Río —uno de los proyectos estrella de Alberto Ruiz-Gallardón, su predecesor— para celebrar el mitin.

Doce años de trabajo

“Llevamos 12 años de trabajo intenso, en los que hemos demostrado que nuestro partido ha servido a los intereses de los madrileños tanto en los buenos como en los malos tiempos”, señaló Botella.

Madrid Río es precisamente el lugar en el que las candidatas del PP en Madrid (Aguirre y Cifuentes) montaron el martes en bicicleta con el presidente, Mariano Rajoy. En la foto no estaba Botella, que es quien ha puesto en marcha el servicio de bicicletas públicas, tras una década de promesas incumplidas.

El viernes, Día de San Isidro, Aguirre desairó a Botella no acudiendo a su último acto público antes de los comicios del 24 de mayo. La candidata pretextó que no había asistido porque debía ir a la misa de once (a la que también fue Botella) y beber el agua del santo. Aunque no apareció hasta la una —hora a la que se había convocado a los medios— y se marchó tras los abucheos y los aplausos de parte de los transeúntes. La de Aguirre fue la gran ausencia, ya que la mayoría de los candidatos al Ayuntamiento acudieron al acto central de Cibeles.

Botella incluyó así en su discurso una crítica a quienes utilicen el Ayuntamiento “para fines distintos”, como “instrumento”, “trampolín o estación de paso”.

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Sobre la firma

F. Javier Barroso
Es redactor de la sección de Madrid de EL PAÍS, a la que llegó en 1994. También ha colaborado en la SER y en Onda Madrid. Ha sido tertuliano en TVE, Telemadrid y Cuatro, entre otros medios. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, está especializado en Sucesos y Tribunales. Además, es abogado y criminólogo.

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