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Trias estudiará la implantación de un salario mínimo en Barcelona

El alcalde afirma que los apartamentos turísticos “han distorsionado” el modelo

Clara Blanchar
Xavier Trias, alcalde de Barcelona, en una imagen de archivo.
Xavier Trias, alcalde de Barcelona, en una imagen de archivo. Gianluca Battista

Costó arrancar un titular en la conferencia anual en el Colegio de Periodistas a finales de enero. Tampoco la semana pasada el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, anunció ninguna novedad durante un almuerzo en el Círculo Ecuestre. Este lunes sí. Esta vez ha sido en la Cámara de Comercio, en el marco de otro almuerzo: ha entrado en campaña electoral con un anuncio y ha lanzado alguna idea sobre turismo la víspera de la inédita audiencia pública prevista para mañana.

El alcalde ha anunciado que estudiará “junto a empresarios y trabajadores, un salario mínimo de Barcelona”. Trias ha apelado a “la economía del bien común, ha manifestado su deseo de que las empresas de la ciudad “lo adopten de forma voluntaria” y ha citado el caso de ciudades como Londres y Nueva York, que cuentan con el llamado living wage. En Londres, en función de la edad del trabajador y el tipo de contrato oscila entre 2,73 y 6,50 libras la hora; en Nueva York (tanto en el Estado como en la ciudad) está sobre la mesa aumentarlo de 9 a 10.50 dólares la hora. ERC se ha afanado en recordar que su candidato a la alcaldía, Alfred Bosch, también anunció la implantación de este salario si resulta ganador de las municipales. La semana pasada, Barcelona en Comú, la candidatura de Ada Colau, prometió no un salario mínimo sino una renta mínima municipal.

El ayuntamiento en su día no fue valiente y no puso la tasa turística;dejó que lo hiciera la Generalitat”

Sobre el modelo turístico, el alcalde ha subrayado que la clave está en “tener claro lo que queremos y lo que no: feria de móviles sí; calidad, sí y no solo calidad económica, también queremos turismo de mochila para que vuelvan dentro de unos años; gamberros de despedida de solteros, no”. Trias ha añadido que en la ciudad “nos han distorsionado los apartamentos turísticos, muchos funcionan desde la alegalidad y han distorsionado el mercado del alquiler”.

El alcalde también se ha referido a la tasa turística. Por un lado ha reconocido que debería repercutir “no solo en promoción, sino también en el bienestar de la gente que vive en las zonas turísticas”. Y por otro ha hecho autocrítica y ha reconocido que “el ayuntamiento en su día no fue valiente y no la puso, dejó que lo hiciera la Generalitat”, de manera que hoy recibe solo una parte de los ingresos que genera la tasa en toda Cataluña.

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Trias ha hablado entre 300 empresarios y representantes de la sociedad civil, además de la mayoría de los concejales del Ayuntamiento, la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, y el consejero de Territorio, Santi Vila. El alcalde ha repasado las principales magnitudes económicas de una ciudad donde, ha reconocido, hay desigualdades. Mientras las inversiones extranjeras crecen o se ha recuperado recientemente la cifra de un millón de cotizantes a la Seguridad Social, los ciudadanos en paro rozan las 100.000 personas. Trias ha recordado también a los empresarios que el Ayuntamiento paga a los proveedores a 30 días, una medida que en su día anunció justo en la sede de la Cámara de Comercio.

El GSMA debe decidir si nos podemos quedar con el Mobile hasta el 2023

La conferencia del alcalde, titulada, “Barcelona, una gran ciudad en constante transformación”, se ha centrado en lo que él mismo ha definido como “la hoja de ruta económica”, que pasa por cuestiones como crear empleo; bonificar fiscalmente a algunos colectivos; atraer inversiones; trabajar con el tercer sector; proteger el comercio; apostar por el turismo de calidad y por las nuevas industrias tecnológicas o potenciar polos económicos como la Zona Franca y la cultura.

En el turno de preguntas han salido cuestiones como la reforma de la Diagonal –Trias ha rechazado el tranvía porque “no cabe”, y ha dicho que se limitará el número de terrazas consensuándolo con los comerciantes--; o la celebración del Mobile World Congress en unas semanas. En este sentido, ha afirmado: “Con el Mobile, la feria y la capitalidad, nos jugamos mucho. Y más cuando la gente que está frente al GSMA debe decidir si nos podemos quedar con el congreso hasta el 2023. En los próximos cuatro meses se sabrá”.

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Sobre la firma

Clara Blanchar
Centrada en la información sobre Barcelona, la política municipal, la ciudad y sus conflictos son su materia prima. Especializada en temas de urbanismo, movilidad, movimientos sociales y vivienda, ha trabajado en las secciones de economía, política y deportes. Es licenciada por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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