El Consorcio inserta publicidad en 50.000 tarjetas de transporte

Los abonos transportes de 50.000 usuarios de la red pública de transportes incluyen desde este mes el logo de El Corte Inglés y un código BIDI (su captura desde el móvil permite el acceso directo para realizar compras en la página web de la compañía), dentro de medida acordada con el Consorcio Regional de Transportes, dependiente de la Comunidad de Madrid. El Consorcio espera, además de unos ingresos sin especificar, “llamar la atención de otros anunciantes” potencialmente interesados en el espacio publicitario que suponen actualmente 50.000 tarjetas de transporte sin contacto y sus fundas.

Desde la Comunidad comparan la iniciativa con la que esponsorizó el pasado marzo la estación de metro de Sol rebautizándola como Sol Galaxy Note. Aunque el consejero de Transportes, Infraestructuras y Vivienda, Pablo Cavero, argumentó “razones comerciales” para no desvelar los ingresos derivados de la campaña publicitaria, el presidente regional, Ignacio González, señaló que las “acciones publicitarias” supusieron 10 millones de euros. El Ejecutivo autonómico prefiere no detallar los ingresos que obtendrá con la nueva publicidad en las tarjetas de transporte.

Aparte del acuerdo comercial con El Corte Inglés, el Consorcio ha abierto otra nueva vía de obtención de ingresos personalizando las tarjetas de transporte público sin contacto. De momento un millar de usuarios han decorado sus tarjetas con una imagen propia o eligiendo una del catálogo que se ofrece: banderas de países, de autonomías, etcétera. El precio es de tres euros.

“Primero promocionaron las estaciones de metro, ahora han metido publicidad en el abono transportes y, pese a ello, los usuarios no han apreciado mejoras en la red de transporte pública ni reducción alguna en los precios de los títulos de transporte”, observa el coordinador general de IU Madrid, Eddy Sánchez.

González afirmó en octubre que las tarifas de transportes “subirán lo previsto con el IPC, nada más”. El PSM le reclamó que congelase las tarifas y recuperase el flujo de autobuses interurbanos. El Consorcio inició una reestructuración del servicio ese mes, recortando un 10% de las 1.400 líneas interurbanas, con un descenso de la frecuencia del 3% de media.