_
_
_
_
_

Medio Rural responde a los incendios con un plan para el 0,32% del monte

La conselleira no explica el retraso en prevención y culpa a los incendiarios

Imagen del incendio que afectó ayer a Santiago
Imagen del incendio que afectó ayer a Santiago ÓSCAR CORRAL

“El monte arde porque alguien le prende fuego”. Ese fue el argumento en torno al que giró la comparecencia de la conselleira de Medio Rural, Rosa Quintana, ayer en el Parlamento de Galicia para evaluar la campaña de incendios. En la Cámara volvió a repetir el anuncio de que prepara un Plan de Valorización do Monte Galego y precisó que invertirá 32,8 millones de euros en mejorar la producción de 4.600 hectáreas forestales. Esa extensión es el 0,32 % de las 1,4 millones de hectáreas de monte que, según la Xunta, hay en Galicia.

 La conselleira inició su intervención con una lluvia de cifras para demostrar que ahora los fuegos se apagan antes que con gobiernos anteriores y que la mayoría son provocados. Dijo que en lo que va de año se han registrado 2.599 incendios que quemaron 10.782 hectáreas, repartidas casi a partes iguales entre arbolado y monte raso. Pero incidió en que fue en agosto, con las más adversas condiciones meteorológicas de sequía y viento, cuando se registraron los peores datos, con incendios “reiterados” en municipios como As Neves (36), Cualedro (16) o Dozón (15).

Más información
Estabilizado el incendio en Santiago, tras quemar 50 hectáreas
Los incendios han arrasado este verano cerca de 11.000 hectáreas
El polvorín ourensano, por C.HUETE
El dinero para la prevención del fuego en Ourense llegó en agosto
El PP abre la puerta a “mejorar” el dispositivo de extinción de la Xunta
Feijóo: “De momento, la campaña de fuegos es extraordinariamente positiva”

La conselleira destacó que el 77% de los fuegos registrados no pasaron de “conatos” de menos de una hectárea de extensión que fueron controlados en poco menos de dos horas. Y puso como ejemplo que el 31 de agosto se registraron en toda Galicia 85 incendios, de los cuales 82 fueron “apagados en el mismo día”.

La oposición, sin embargo, le respondió también con datos para hacerle ver que, aunque este año se ha producido una menor media de incendios diarios, “se desmadran muchos más”, según la diputada del BNG Tereixa Paz. O que “hay menos fuegos pero más hectáreas afectadas”, según David Fernández, de AGE.

Pese a que la oposición le echó en cara el retraso en las tareas de prevención de incendios, muchas no encargadas hasta ya entrado el mes de agosto, Quintana eludió dar explicaciones. Solo al final de su intervención dejó caer que si se hacen limpiezas demasiado pronto en primavera puede ser necesario volver a realizarlas en verano, sin aclarar qué inconveniente habría en ello. Tampoco se refirió la conselleira al retraso en la contratación de efectivos aéreos que la propia Xunta preveía tener ya operativos el 1 de agosto. Quintana se limitó a defender la necesidad de que los equipos se incorporen y se retiren de forma gradual en primavera y otoño.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

La oposición coincidió en atribuir la causa última de los incendios al abandono rural y a la ausencia de una correcta política forestal. Ante esas críticas la conselleira anunció que invertirá, sin fijar plazos, 32,8 millones de euros en actuaciones de mejora y diversificación tanto de la producción forestal como en su transformación. Según Medio Rural, “se desarrollarán actuaciones en más de 150 zonas y 4.600 hectáreas de monte de Galicia, ligadas a las comunidades vecinales y a la población del rural”. A una media de 30 hectáreas por zona de actuación, se intervendrá apenas en el 0,32% de todo el monte gallego. Como comparación, esas 4.600 hectáreas suponen menos de la mitad de las que se han quemado en lo que va de año, cifra que aún no se ha cerrado. Ayer mismo se declaró otro incendio con riesgo para viviendas en Santiago, que a primera hora de la noche había afectado a unas 50 hectáreas, según Medio Rural.

Quintana también recordó que en la ola de incendios de 2006, con el bipartito, ardió diez veces más que este año, a lo que la oposición respondió recordando la imagen de Alberto Núñez Feijóo, entonces en la oposición, con una manguera. Fue una más de las muchas escaramuzas que se produjeron en un agitado primer pleno del nuevo curso político, en el que varios diputados fueron llamados al orden. Dos de AGE, Xosé Manuel Beiras y David Fernández, quedaron a un aviso de ser expulsados del hemiciclo y la presidenta, Pilar Rojo, retiró la palabra a Ana Pontón, del BNG, que insistía en hablar del accidente del tren Alvia cuando el conselleiro de Infraestruturas, Agustín Hernández, intentaba hacerlo de la reducción de siniestros viarios.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_