_
_
_
_
_

La Jaume I pide la paralización de la sanción a los estudiantes

El Rectorado anuncia que ya se ha abierto un procedimiento informativo sobre los incidentes y que, “si procede”, las sanciones serán impuestas por la propia universidad.

El Rectorado de la Universitat Jaume I de Castellón ha pedido a la Consejería de Gobernación que paralice las sanciones administrativas que pudieran imponerse a los estudiantes que participaron el pasado lunes en las protestas durante una visita del presidente valenciano Alberto Fabra que acabaron con un joven detenido y una quincena de identificados (solo seis de ellos estudiantes de la Jaume I). En un comunicado, el Rectorado anuncia que ya se ha abierto un procedimiento informativo sobre los incidentes y que, “si procede”, las sanciones serán impuestas por la propia universidad.

“El Rectorado ha recopilado información de la Consejería de Gobernación, de la Subdelegación del Gobierno, de los trabajadores del edificio de Espaitec II [donde se dieron los incidentes], de los guardias de la seguridad privada del campus y de las asociaciones estudiantiles convocantes de la concentración”, indicaron en un comunicado. Es a partir de estas entrevistas con las que el rectorado ha pedido llevar la iniciativa en las posibles sanciones.

Así, insisten en que desde la Jaume I no se solicitó la presencia preventiva de la policía y que la presencia de una unidad de la Policía Nacional adscrita al cuerpo autonómico “se debió al hecho de que venían acompañando, en su trabajo de escolta y seguridad, al presidente de la Generalitat y otros miembros del Gobierno valenciano”.

Partes de lesiones

Según la dirección de la universidad, la entrada de un grupo de personas en el garaje del edificio, “así como otros intentos no autorizados de acceso al mismo” llevó a los guardias de seguridad privados “a solicitar el apoyo de los agentes de la policía autonómica allí presentes”. El rectorado apunta que, según la versión de la seguridad del campus, “el comportamiento de los manifestantes fue claramente violento” y que por ello “exigió la intervención policial”. Una intervención que los estudiantes han calificado de “desproporcionada” y para ello han presentado 14 partes de lesiones que recoge el comunicado de la Jaume I.

El comunicado confirma la versión de la Subdelegación del Gobierno y afirma que, pese a que los agentes autonómicos pidieron más presencia policial, ésta “no fue autorizada por el Rectorado al entender que la situación no lo requería”. Finalmente, desde el rectorado condenaron “cualquier tipo de violencia” y pidieron que las protestas se realicen “desde el respeto”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_