La Capilla Gitana de la Modelo tendrá una segunda vida

Ahora permanece tapada con una gruesa capa de cal que la blanqueó por decisión de la dirección de Servicios Penitenciarios de la Generalitat en 1998. La Capilla Gitana fue pintada por el ilustrador del cartelismo republicano Helios Gómez en 1950, que estuvo preso en la Modelo en varias ocasiones por su militancia política. Lo hizo a instancias del párroco del penal, Bienvenido Lahoz, y el artista representó a santa Eulàlia, copatrona de la ciudad, con el niño en brazos, acompañada de un coro de ángeles gitanos y a sus pies varios presos implorando perdón. Se sabe que las pinturas están debajo la capa de cal porque en 2001 se hizo una cata en las paredes y se descubrieron fragmentos de ella.

La Asociación Cultura Helios Gómez, que tiene a Gabriel Gómez, hijo del pintor fallecido como principal promotor, lleva años batallando por recuperar ese espacio y por impulsar un centro de arte gráfico político social que explique la memoria del que ha sido penal durante más de 100 años. “Nos hemos vuelto a reunir con responsables municipales del área de Memoria Histórica e incluso abordé directamente a la alcaldesa Ada Colau hace unas semanas. Tenemos buenas palabras pero sin concreciones”, explica Gómez. Sin embargo, la decisión de darle una segunda vida a la capilla por parte del gobierno municipal parece clara ya que estudiará cómo recuperar y conservar las pinturas de ese espacio por el “valor patrimonial que tienen y por la historia de la prisión”, según concreta un portavoz municipal. Antes, se hará un estudio para ver en qué situación está y si es posible recuperarla y reconstruirla. “Conceptualmente es evidente que esa pintura se debería recuperar y conservar pero habrá que ver cómo se puede hacer”, considera el concejal nacionalista Jaume Ciurana.

Cierre inminente

La capilla en cuestión está en la primera celda del primer piso de la cuarta galería, el espacio que ocuparon durante el franquismo los presos condenados a muerte. La celda ha permanecido cerrada durante años aunque esa galería ha seguido albergando población reclusa. Gómez ha tenido, también, varios encuentros con responsables de prisiones de la Generalitat que no atendieron sus demandas de recuperar la capilla. En la última de ellas, hace unas semanas, le instaron a que “esperara un poco porque el cierre de la cárcel ya era inminente”, apunta el hijo del artista. A preguntas de este periódico, un portavoz de Justicia se limitó a decir que ahora “corresponderá” al Ayuntamiento tomar la decisión respecto a la capilla.

Gómez tampoco logró que se culminara un mural realizado en el espacio que ocupaba el edificio de régimen abierto de la cárcel, en la esquina de Entença y Roselló. El mural, promovido por la plataforma Fem nostre l’espai de la Model, solo se realizó parcialmente porque el graffiti reivindicativo que tomaba como referencia dibujos de Helios Gómez —una imagen dura de la vida del penal— no agradó a la dirección de prisiones. “Yo sigo considerándolo como censura pura y dura”, sostiene el hijo del artista. La versión final —la autorizada— fue mucho más light.

Además de la cuestión de la capilla, la asociación plantea que esa galería, la cuarta, sea el espacio que se dedique a explicar la memoria de la Modelo a la que definen como un “instrumento del terrorismo del Estado”. Según la propuesta que han realizado en un informe, entregado al consistorio, parte del fondo que debería nutrir ese centro serían carteles y material gráfico de la cárcel. En relación a esa demanda concreta, el consistorio supedita todo lo relativo al aspecto memorial de la cárcel “al proceso de recuperación de la Modelo para uso ciudadano”, un proceso que se hará con la participación de los vecinos. Se da por sentado que una parte de la cárcel se dedicará a explicar la memoria de ese penal y del mundo carcelario en general pero sin más concreciones.