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Las listas de espera crecen en más de 4.000 pacientes en un año

El aumento de los enfermos que aguardan un operación está vinculado, según Salud, a la reducción de las demoras en consultas externas y pruebas diagnósticas

Jessica Mouzo
El consejero de Salut, Antoni Comín.
El consejero de Salut, Antoni Comín.Massimiliano Minocri

Las listas de espera quirúrgica siguen al alza. En diciembre de 2016, 164.828 personas estaban a la cola para entrar a un quirófano, 4.024 más que en 2015. Los pacientes en espera crecen, sobre todo, en las operaciones que tienen un tiempo de demora de referencia máximo de un año. El Departamento de Salud achaca este incremento a una bajada en el número de pacientes que aguardaban para visitar al especialista o una prueba diagnóstica, puertas de entrada a la lista quirúrgica. Con todo, Salud cumple los plazos en las operaciones más graves y ha logrado reducir los pacientes que llevan más tiempo esperando en todos los procesos.

En términos globales, la lista de espera quirúrgica ha aumentado un 2,5% en el primer año del consejero de Salud, Toni Comín, al frente del Departamento. La peor parte se la ha llevado la bolsa de operaciones (unas 100) que tienen una espera máxima de referencia de un año: 132.621 personas aguardan una intervención de este tipo, 6.247 más que en 2015. Además, 13.367 enfermos superan el año de espera estipulado por el Departamento.

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En el apartado que Salud sí ha mantenido el tipo y ha cumplido la mayoría de los plazos de espera máximos garantizados por ley es en las operaciones oncológicas y de cirugía cardíaca, aunque en estas últimas el número de pacientes en espera ha crecido. En cataratas, prótesis de cadera y de rodilla, se han reducido también los enfermos que aguardan una operación, pero todavía quedan 2.699 personas que superan el plazo máximo de demora de seis meses marcado por la ley.

Sin Presupuestos para llevar a cabo su plan de choque —reducir un 50% los tiempos de espera para consultas externas y pruebas diagnósticas y bajar un 10% los pacientes de la lista quirúrgica—, el Departamento ha tirado de “eficiencia” y “productividad” para adelgazar las colas de las listas de los pacientes que llevan más tiempo aguardando una intervención, una prueba médica o una visita con el especialista. “Poner el foco en las personas nos hace olvidar que lo importante aquí es el tiempo que esperan”, apuntó el director del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut), David Elvira.

El 56% de las derivaciones, a centros privados

Las derivaciones de pacientes de su centro de referencia para operarse en otros hospitales de la red pública creció un 18%. Salud registró 14.172 derivaciones en 2016, el 56,4% de ellas a centros con afán de lucro.

La Clínica del Vallès, el primer centro privado expulsado de la red pública el pasado agosto asumió hasta esa fecha 2.043 derivaciones de pacientes. La Clínica de Ponent atendió otros 1.945 enfermos. El Hospital General de Cataluña, el otro centro a punto de reducir su contrato con Salud, también se hizo cargo de 304 derivaciones. A la Clínica Girona desviaron 1.429 pacientes, al Sagrat Cor otros 1.095 enfermos y a la Clínica Terres de l'Ebre, 1.182 personas más.

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En este sentido, Salud disminuyó en casi un 20% (3,285 pacientes menos) la cola de las operaciones con plazos de referencia. En consultas externas redujo la lista de espera en 124.694 pacientes, 49.700 de ellos que superaban los tiempos de referencia de tres meses de espera máxima. Todavía quedan, no obstante, más de 532.000 personas aguardando por una visita al especialista.

La cola de las pruebas diagnósticas también se rebajó en un 22,3% (11.560 pacientes menos), pero todavía hay en espera 135.809 personas, 40.385 de ellas aguardan también desde hace más de tres meses.

A expensas de que se aprueben los Presupuestos, Elvira dijo ayer que el plan de choque se mantendría “inalterable”, aunque no dedicarán los 96 millones previstos en un primer momento. Para cumplir los compromisos de rebajar las listas de espera, Salud dispondrá de 57 millones. La mayor parte del presupuesto (41 millones) se destinará a las 10 intervenciones que concentran más del 50% de los pacientes fuera del tiempo máximo de demora estipulado. Por ejemplo, prótesis de rodilla, hernias inguinales y obesidad mórbida, entre otras.

El departamento también evaluará los resultados posoperatorios con llamadas a los pacientes para evaluar su percepción de salud y estudiará la variabilidad entre los centros de atención primaria a la hora de derivar a sus pacientes de referencia al especialista.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.

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