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La remodelación del campo del Nàstic afianza los Juegos del Mediterráneo

Una inversión de dos millones acicalará el estadio para las galas de apertura y clausura

Marc Rovira
Recreación del Nou Estadi de Tarragona tras la inversión para los juegos de 2017.
Recreación del Nou Estadi de Tarragona tras la inversión para los juegos de 2017.

A falta de ocho meses para la ceremonia de inauguración de los Juegos del Mediterráneo 2017, Tarragona trata de despejar dudas sobre la celebración del evento. El comité organizador presentó ayer un paquete de inversiones de más de 2,5 millones de euros para asear el estadio del Club Gimnàstic y toda la zona periférica. El campo es el lugar escogido para albergar las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos y va a acometer, en los próximos meses y contrarreloj, un proceso de restauración que el alcalde y presidente del comité organizador, Josep Félix Ballesteros, considera muy necesario. Entre las mejoras que se introducirán en el recinto antes de que la llama del pebetero empiece a arder hay nuevos accesos, la eliminación de las barreras arquitectónicas, la mejora de la iluminación y la sustitución de los actuales asientos rojiblancos, 14.500, por otros tantos que luzcan el rutilante color grana que identifica al Nàstic.

El Nou Estadi fue construido en 1972 y ha acogido los principales éxitos del Nàstic, entre los que destaca su paso por Primera División durante la temporada 2006-2007. “El estadio está muy mal, tiene muchas deficiencias”, señaló el presidente del Gimnàstic, Josep Andreu. Ballesteros no le quitó la razón y admitió que la renovación se debería haber realizado antes. “No teníamos las partidas presupuestarias para hacerlo”, se justificó el alcalde. La reforma se realizará mientras el Nàstic se halla en plena competición liguera.

La organización de los Juegos está habituada a trabajar bajo la presión del calendario, ya que son varias las instalaciones que deberán acoger pruebas deportivas y que aún están en obras. En relación con el estadio, Ballesteros confía en que “en abril o mayo” esté todo terminado. “Llegamos bien para los Juegos”, aseguró.

La mayor parte del gasto de este proyecto corre a cargo de fondos estatales y el Ayuntamiento asume los 650.000 euros que cuesta derribar la antigua carretera variante que linda con el estadio y que lo aísla de los barrios de la ciudad.

La presentación del boceto de obras coincide con el avance de las negociaciones con RTVE para que cubra las pruebas y supone un espaldarazo de confianza a un evento que por momentos ha navegado en la incertidumbre. A primeros de mes, el Congreso de los Diputados aprobó una declaración institucional de apoyo a los Juegos del Mediterráneo Tarragona 2017. La resolución fue aprobada por todos los portavoces de los grupos parlamentarios con representación en la cámara.

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