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El abogado del pederasta confeso de los Maristas renuncia a defenderlo

Joaquín Benítez acumula 17 denuncias de exalumnos de los que, presuntamente, abusó sexualmente

Alfonso L. Congostrina
Benítez, escoltado por los Mossos, cuando declaró el pasado 6 de febrero.
Benítez, escoltado por los Mossos, cuando declaró el pasado 6 de febrero.Quique García (EFE)

El letrado que consiguió que el exprofesor de gimnasia de los Maristas, Joaquín Benítez, quedara en libertad el pasado 6 de febrero -tras confesar que había agredido sexualmente a varios alumnos- ha renunciado a la defensa del pederasta confeso. El abogado, de oficio, defendió por primera vez a Benítez el mismo que día que aparecía en la prensa su autoinculpación. El exprofesor volvió a confesarse culpable ante el titular del juzgado de instrucción número 6 de Barcelona. Fiscalía solicitó su ingreso en prisión pero el juez le dejó en libertad tal y como solicitó su abogado. Pese a todo, el letrado ha abandonado a Benítez y ahora es otra letrada, también de oficio, la que se ha hecho cargo de su defensa.

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Durante esta mañana, dos nuevas víctimas de Benítez han ratificado las agresiones sexuales a las que fueron sometidos. El pederasta confeso acumula ya denuncias de 17 exalumnos de Maristas. Entre las víctimas se encuentra el hijo de Manuel, el padre que ha conseguido destapar todo el escándalo. Los dos denunciantes han relatado diferentes episodios en los años 2007 y 2010 en los que han relatado felaciones y masturbaciones efectuadas por Benítez.

El exprofesor de gimnasia declarará por segunda vez en los próximos días. El pasado 6 de febrero se enfrentó a un interrogatorio en el que se le acusaba de cuatro casos. La próxima ocasión será de 17 exalumnos que le han denunciado por abusos y agresiones sexuales. El pederasta confeso también se enfrentará al interrogatorio del letrado de varias de las víctimas, Iban Fernández, que pedirá su ingreso en prisión.

Manuel, el padre que destapó el escándalo, ha asegurado este lunes que enviará una carta a todos los diputados del Parlament exigiendo una comisión de investigación para aclarar las responsabilidades de las instituciones.

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