_
_
_
_
_

CiU y ERC aprueban el decreto para convertir el ICF en banco público

La institución financiera de la Generalitat queda ahora a la espera de la ficha bancaria

Dani Cordero

La Diputación Permanente del Parlamento ha aprobado hoy con los votos favorables de CiU y ERC y las abstenciones de ICV-EUiA y del PSC el decreto que da cobertura legal a la conversión del Instituto Catalán de Finanzas (ICF) en banco público. La votación, celebrada in extremis a un mes de las elecciones autonómicas, va en la línea de las adaptaciones internas que ha efectuado la institución financiera de la Generalitat, con lo que ahora solo faltaría que el Banco Central Europeo (BCE) le otorgara ficha bancaria, un paso en el que es decisivo un informe del Banco de España.

Solo el PP y Ciutadans se han negado a permitir la aprobación del decreto, con el argumento de que se trata de otro intento de crear estructuras de Estado, ya que el ICF estaría llamado a ser el embrión de un hipotético banco central en el caso de que Cataluña fuera independiente. "No creemos en un ICF al servicio del proceso soberanista", ha señalado el diputado popular Enric Millo. Inés Arrimadas, de Ciutadans, ha criticado que "se pretenda hacer creer que tendremos un banco central para una hipotética Cataluña independiente".

El consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, ha defendido por otros motivos la conversión de institución financiera en banco pública. Básicamente porque se asimila al resto de entidades de crédito europeas y porque blinda a la Generalitat de tener que apuntar la deuda del ICF en el déficit de la Generalitat si en el futuro Eurostat plantea un cambio del sistema europeo de contabilidad (SEC). El consejero ha defendido el trámite de urgencia por la necesidad de dotarle de un nuevo régimen jurídico y facilitar el acceso a la financiación a las empresas.

Pese a esos argumentos esgrimidos por Mas-Colell, es cierto que la conversión del ICF en un banco público equivalente al Instituto de Crédito Oficial (ICO) es uno de los puntos sobre estructuras de estado a crear que estipulaba el acuerdo de CiU y ERC que permitía la investidura de Artur Mas. La tramitación está siendo mucho más lenta de lo esperado y ahora desde la Generalitat no se atreven a dar una fecha sobre cuando el ICF tendrá licencia bancaria.

La representante del PSC Eva Granados ha criticado al Ejecutivo de Mas por haber esperado hasta el final de la legislatura para convertir el ICF en un banco público perdiendo la oportunidad de los años de crisis en los que era más necesario, y ha advertido del riesgo que detecta en el decreto de "pérdida de control público". Por último, el diputado de ICV-EUiA Josep Vendrell se ha proclamado defensor de un banco público para Cataluña "en cualquier caso y en cualquier circunstancia", pero ha reprochado al ejecutivo catalán su "desgana e improvisación" por no haber reformado la ley del ICF a través de un proyecto de ley.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Dani Cordero
Dani Cordero es redactor de economía en EL PAÍS, responsable del área de industria y automoción. Licenciado en Periodismo por la Universitat Ramon Llull, ha trabajado para distintos medios de comunicación como Expansión, El Mundo y Ara, entre otros, siempre desde Barcelona.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_