El socialista Ximo Puig elegido nuevo presidente del Gobierno valenciano
El PSPV, Compromís y Podemos, que solo le ha apoyado con ocho de sus 13 votos, permiten al único candidato ser elegido en primera votación
El socialista Ximo Puig ha resultado elegido como nuevo presidente de la Generalitat valenciana esta tarde en una votación que ha concluido a las 18.30 horas. Puig ha logrado una ajustada mayoría absoluta de 50 votos sobre 99 con el apoyo del PSPV-PSOE (23), Compromís (19) y Podemos que, finalmente, ha optado por dividir a sus diputados. Ocho han votado a favor y otros cinco se ha abstenido para recordarle a Puig que se trata de "un apoyo condicionado y crítico".
Puig (Morella, 1959), periodista de formación, prometerá su cargo ante el pleno de las Cortes Valencianas el próximo domingo por la mañana y se convertirá en el sexto presidente de la Generailtat y el segundo del PSPV tras 20 años ininterrumpidos de Gobiernos del PP.
Tras la votación, Puig ha sido felicitado por el presidente saliente, el popular Alberto Fabra, que ha cruzado el hemiciclo para estrecharle la mano. Acto seguido, el nuevo presidente de la Generalitat, en medio de los aplausos de su grupo, se ha abrazado con los portavoces de Compromís, Mònica Oltra, y de Podemos, Antonio Montiel.
El PP (31 diputados) y Ciudadanos (13) han votado en contra de la investidura, aunque tanto el popular Alberto Fabra como Carolina Punset, del partido de Albert Rivera, se han mostrado dispuestos a llegar a acuerdos con el nuevo presidente de la Generalitat en materias concretas como la lucha contra la corrupción, políticas de empleo o bajada de impuestos.
El nuevo Gobierno valenciano se nombrará, previsiblemente, el próximo lunes y contará, además de con la presidencia, con una vicepresidencia que ocupará Mònica Oltra y ocho consejerías, cuatro de las cuales bajo la influencia del PSPV y otras cuatro bajo la influencia de Compromís. Podemos, que hoy ha facilitado la investidura, se limitará a dar apoyo parlamentario al nuevo Consell y formará parte de una comisión de seguimiento del pacto de gobierno, conocido como el Acord del Botànic, para vigilar el cumplimiento de las políticas acordadas y proponer nuevas iniciativas.
Ximo Puig ha admitido que se abre una nueva etapa, con una manera de hacer política diferente en la que no hay cheques en blanco y donde la ciudadanía tendrá mucho más protagonismo.
