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Manuela Carmena: “Se ha acabado el tiempo del cemento y el hormigón”

La candidata de Ahora Madrid revisará el sobrecoste de las obras de la M-30 y auditará la deuda del Ayuntamiento del PP

Guante de seda, mano de acero. En un tono sereno y conceptualmente preciso, Manuela Carmena (1944), exjueza fundadora de Jueces para la Democracia y hoy candidata a la alcaldía por la plataforma Ahora Madrid, ha comparecido hoyl ante el Club Internacional de Prensa con un discurso directo y contundente que aplicará si alcanza el gobierno municipal. “Se ha acabado el tiempo del cemento y del hormigón en Madrid, la ciudad no puede seguir creciendo hacia el exterior”, añadió, mientras apuntaba, a propósito de la Operación Chamartín: “El norte de la ciudad no necesita 17.000 nuevas viviendas”. En base a ello recomendó a los constructores interesados “que se den un paseo por los PAU de viviendas vacías del sur”. Y opuso: “Frente al vicio de construir hay que oponer la virtud de mantener; es necesario cuidar y hacer crecer la ciudad hacia el interior”, subrayó Carmena.

Mostró su voluntad de atenerse a una Circular de la Comisión Europea que insta a las instituciones públicas a contratar con un porcentaje de pequeñas empresas. “Por mi experiencia comprobé en su día que no existen apenas litigios entre las grandes constructoras e inmobiliarias respecto a las adjudicaciones de contrataciones, por lo cual deduzco que actúan como cárteles: si hoy contratan con una, mañana contratarán con la otra”, explicó. Y se avienen a ello.

La primera medida que contempla aplicar si alcanza la alcaldía será el despliegue de un llamado Plan de Choque sobre la franja de población a la que ella designa como “los invisibles”. Concierne a los sectores sociales más castigados por la pobreza, la malnutrición y la escasez energética. Irá destinada a garantizar la supervivencia de 60.000 personas, unas 14.000 familias, golpeadas por la penuria extrema. “Serán 200 millones de euros, cifra que puede parecer elevada pero que compone tan solo el 1,8% del presupuesto municipal”. Se plantea aplicar la sanidad gratuita universal a todos los residentes en Madrid y baraja la idea de “dotar de un carné de identidad a los sin papeles”, según la idea del edil neoyorquino Bill de Blasio. “Hemos sabido que los vecinos del barrio de Salamanca viven cuatro años más que los de Vallecas” y propone que tan patente desajuste debe equilibrarse (al alza), para lo cual preconiza que los centros de salud se apliquen a cometidos sanitarios.

En relación a los desahucios, “4.000 cada año en Madrid” que consideró parte del “seísmo social que implican”, la candidata a la alcaldía por Ahora Madrid propone “crear Oficinas Municipales adjuntas a los juzgados que entienden sobre casos de desahucio, para conseguir que las familias afectadas puedan proseguir su vida familiar, bien por mediación con los bancos, bien por alargamiento de los plazos de ejecución”.

Con relación a las cuentas municipales, Manuel Carmena se mostró explícita: “Las obras de la M-30 fueron presupuestadas en 1.000 millones de euros, pero el gasto final fue de 7.000 millones de euros. Queremos saber a qué obedeció ese sobrecoste”. Y agregó: “Claro que vamos a hacer una auditoría de la deuda municipal, necesitamos saber de dónde proceden las deudas del Ayuntamiento y si obedecen a razones justificadas o no”. Asimismo, se mostró inclinada a renegociar los plazos de amortización. Del IVI destacó que era partidaria de “suprimir algunos tramos, no la totalidad”.

Respecto a la sede municipal del Palacio de Cibeles, sobre si suscribe o no las recientes declaraciones de Esperanza Aguirre según las cuales quiere abandonarlo y volver a la plaza de la Villa, Manuela Carmena destacó: “Sus declaraciones sobre ese extremo son pura demagogia, ya que el palacio de Cibeles es una cesión de Patrimonio del Estado al Ayuntamiento, que sería revertido”.

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Recientemente, explicó la candidata de Ahora Madrid, visitó la sede municipal de Cibeles: “Quedé muy impresionada por lo vacía y desolada que está, cuando hay departamentos municipales dispersos por Madrid, por los que se pagan rentas muy altas. Vamos a proponer”, añadió “llenarlo con los departamentos dispersos”. Asimismo, propuso: “Queremos construir un jardín civil dentro del palacio municipal, en el tramo que conecta las calles de Montalbán con la de Alcalá, para que todo el mundo pueda disfrutar de él y darse cuenta de que el Ayuntamiento no puede ser una institución hostil a la ciudadanía”.

Carmena señaló también que se propone “habilitar espacios públicos y municipales de Madrid para que se puedan celebrar en ellos bodas civiles”, habida cuenta de la necesidad de desplegar “una liturgia cívica, que no se ha podido desarrollar a consecuencia del aplastante peso (de la liturgia) del catolicismo” sobre este tipo de ceremonias.

En cuanto al tráfico urbano Manuela Carmena se mostró partidaria de “premiar a quienes eviten adentrarse en automóvil hasta en el centro de Madrid, mediante descuentos en el metro”; y anunció la importancia que otorgará a los estacionamientos periféricos para satisfacer tal objetivo. “No soy partidaria de una amnistía de las multas de estacionamiento, creo que sería una medida peligrosa”, respondió a una pregunta al respecto. Y de la estación denominada Vodafone-Sol, reivindicó que “se llamará Sol-Sol, como quieren los madrileños y las madrileñas”.

Con relación al Urbanismo y a propósito de una pregunta sobre si ella es o no partidaria de los Planes Generales de Ordenación Urbana modificados “a la carta” por intereses inmobiliarios, Manuela Carmena remarcó ser “más partidaria de planes parciales, de barrio o distrito, con objetivos concretos, que, por ejemplo, del Plan General de 1997, que acabó ahogando la industria que existía en Madrid”. Abogaba a sí por una suerte de reindustrialización y por un cambio que lleve a los ciudadanos a tener en cuenta que “la construcción no es la única manera de crecer y desarrollarse la economía”.

En el ámbito medioambiental, la exjueza Carmena, se compromete a crear circuitos culturales terrestres y ciclistas como una mentada “Línea verde”, para conectar el palacio de la duquesa de Osuna, “en el siglo XVIII una de las primeras feministas de Europa, palacio enclavado en el parque de El Capricho, con la Quinta de Los Molinos y la finca Torre Arias, recientemente recobrada por los vecinos frente a la tentativa de opción de compra al Opus Dei ofrecida por el Gobierno municipal del PP”. A juicio de la candidata, “me gustaría mucho que fueran los vecinos quienes mostraran al público los tesoros patrimoniales de sus barrios”. Por otra parte, negó cualquier tipo de subvención municipal hacia las corridas de toros. Preconiza la descentralización cultural de la ciudad, para evitar la condensación que los vecinos del centro soportan.

En los aspectos estrictamente políticos, ManuelaCarmena dijo que el desdén de Mariano Rajoy por los partidos emergentes lo consideraba “un error”. Y sobre el intento del ministro de Justicia, Rafael Catalá, de multar a los medios de comunicación que filtren sumarios judiciales afirmó que consideraba que tal medida sería antidemocrática y jurídicamente irregular. Recalcó que solo se ha entrevistado una vez, en el programa “La Tuerca”, con Pablo Iglesias, líder de Podemos y dijo que los miembros de esta formación que figuran en la plataforma Ahora Madrid de la que es candidata, “están integrados a título personal”. Sobre la formación de Iglesias aseguró que “todo aquel precursor corre el riesgo de que le arrebaten sus ideas los que vienen detrás, como sucedió al eurocomunismo con el PSOE en la Transición”, en relación al partido Ciudadanos. De Ada Colau, candidata de la coalición Guanyem a la alcaldía barcelonesa, Carmena dijo que la conocía a través de una tertulia radiofónica que ambas compartieron en la SER. “Creo que el próximo 6 de mayo Ada viene a Madrid y allí la conoceré personalmente”. De posibles pactos poselectorales con el PSOE Carmena dijo: “la línea roja es la corrupción”, afirmación que no explicó.

Como colofón, apuntó: “Nunca me ha interesado la política y la de los partidos políticos, menos todavía”. Acto seguido aseguró: “Me identifiqué con el movimiento del 15-M cuando escuché que los jóvenes en las calles, pero también de las gentes adultas, las emisoras, las televisiones, criticaban la forma de representación política que hoy se realiza desde las cámaras (parlamentarias). Esa es una forma de representación política que ya no sirve”. De ahí deriva, explicó, su integración como candidata en una plataforma plural de izquierda como Ahora Madrid, donde se integra Ganemos, Equo, algunos sectores de IU y miembros de Podemos, “plataforma que lleva dos años trazando un programa que ha sido votado por 1.000 personas”. Y concluyó: “No me gustan los mítines, son una liturgia en la que me siento incómoda”. El fin último de su candidatura, aseguró, consiste “en impedir que ocupe la alcaldía de Madrid una señora (Esperanza Aguirre) que es responsable del nombramiento de veinte personas imputadas por corrupción, algunas de ellas ahora en prisión”.

Manuela Carmena asegura que Ahora Madrid choca con la negativa a acceder a TVE, Radio Nacional y Telemadrid y a algunas televisiones privadas obedece al propósito de “impedir que nuestra opción política se visualice”.

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