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Camps comentó con Barberá la opción de celebrar los Summit en Valencia

El expresidente admite ante el juez de Nóos que coincidió con Urdangarin pero sin hablar del evento

La segunda declaración del expresidente de la Generalitat Francisco Camps como testigo del caso Nóos, el pasado 15 de abril, añade poca información a lo que ya respondió a finales de enero, cuando descargó en los servicios jurídicos de la Administración valenciana la firma de contratos sin concurso con el instituto de Iñaki Urdangarin. Camps reconoce que coincidió en algún acto institucional con Urdangarin pero niega que en alguna de sus conversaciones saliera a relucir el proyecto Valencia Summit, del que se celebraron tres ediciones con un coste para las arcas públicas de más de tres millones de euros.

El expresidente, que prestó declaración por escrito en su despacho en el Consejo Jurídico Consultivo, niega una declaración anterior en la que el duque de Palma refirió que tuvo varias reuniones en Valencia con Camps para explicarle el proyecto de los Summit: “Las reuniones no tuvieron lugar”, declaró a la par que rechaza que tenga amistad o enemistad con él.

Camps niega también haber facilitado una lista a los miembros del Instituto Nóos con la relación de instituciones de la Comunidad Valenciana que pudieran ser patrocinadores del evento y reconoce que comentó de pasada con la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, la posibilidad de celebrar en Valencia un congreso que uniese deporte y proyección de la ciudad. “El comentario fue muy de pasada (…) Se trató de un comentario genérico”, añadió.

El expresidente sí reconoce que participó en actos protocolarios de los Valencia Summit y admite que “todos los acontecimientos que se realizaron en aquella etapa repercutían favorablemente en la imagen de la Comunidad Valenciana, si bien remite a los organizadores de los Valencia Summit cuando los abogados le preguntaron por el impacto de esas jornadas en la ciudad y en la celebración de la Copa del América. “Los organizadores a buen seguro, tendrán datos respecto de la repercusión” de las tres ediciones de los Summit, que costaron más de tres millones de euros a las arcas públicas valencianas.

La amnesia fue el denominador común entre los testigos que declararon ante el juez José Castro por la organización de este evento, según la transcripción de las pruebas testificales prestadas en Valencia los pasados 11 y 12 de abril. La exconsejera de Industria Belén Juste, que declaró como miembro del patronato de la fundación Turismo Valencia Convention Bureau, aseguró no recordar muchos detalles acerca de la reuniones en las que se planteó la celebración de la Valencia Summit. "No recuerdo absolutamente nada, pero vamos, nada". Sin embargo, atribuyó la toma de decisiones al gerente, José Salinas, y al presidente, Alfonso Grau (teniente de alcalde del Ayuntamiento de Valencia). 

Tampoco demostró tener mucha memoria el anterior presidente de Feria Valencia, Alberto Catalá, que fue miembro del Consejo Permanente de la Fundación Valencia Turismo entre 2004 y 2005. Catalá dijo desconocer cuántas ediciones se celebraron de este evento y no recordar "para nada" los asuntos referentes tratados en las reuniones a las que asistió, aunque su memoria sí que ha retenido "cómo se enfadaba Arturo Virosque", el entonces presidente de la Cámara de Comercio, porque había que subir unas escaleras para celebrar las reuniones.

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Incluso la ahora concejal de Cultura del Ayuntamiento de Valencia, María Irene Beneyto, refirió saber "muy poco" de Valencia Summit pese a ser miembro del patronato en representación del Consistorio: "No recuerdo absolutamente nada".

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