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LA CRISIS DE UNA GRAN COOPERATIVA

El Estado se opone a la venta de las marcas de Fagor a Cevital

El Gobierno considera que los 25 millones ofrecidos por el grupo argelino son inferiores a los que se podrían obtener en el mercado

San Sebastián -

La Abogacía del Estado ha remitido un escrito al Juzgado de lo Mercantil número 1 de San Sebastián, que gestiona el concurso de acreedores de Fagor Electrodomésticos, en el que se opone a la venta de las marcas del grupo a la argelina Cevital. Fuentes de la Abogacía del Estado han confirmado que en este escrito, registrado la semana pasada, argumenta que los 25 millones ofrecidos por el grupo argelino Cevital por hacerse con las marcas internacionales de Fagor -propiedad de la filial Fagor Ireland- constituyen un precio muy inferior al que podría obtenerse por su venta. La Abogacía del Estado tiene interés en la causa por representar a las empresas públicas que son acreedoras del grupo Fagor Electrodomésticos.

Además, el Estado considera que la oferta de Cevital para hacerse con las marcas Brandt, De Dietrich, Vedette, Sauter y Easycook no asegura la compra de unidades de negocio en España, por lo que no garantiza el mantenimiento de puestos de trabajo en las plantas del grupo cooperativo. La Abogacía del Estado entiende que vender las citadas marcas dejaría a los negocios del Fagor Electrodomésticos sin uno de sus principales atractivos para lograr algún acuerdo que permita la continuidad de sus negocios.

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de San Sebastián admitió a trámite el pasado 27 de febrero la solicitud de Fagor Electrodomésticos para vender sus marcas al grupo argelino Cevital, y abrió un plazo para conocer si alguna empresa más estaba interesada en plantear "ofertas mejores" y "globales" sobre el grupo cooperativo. El plazo concluyó sin que ningún otro grupo haya presentado ninguna oferta por las marcas de la cooperativa de la Corporación Mondragón. Según explicó Fagor en su escrito para solicitar al Juzgado que permita la venta, la operación significaría "el mantenimiento de más de 1.200 puestos de trabajo en Francia, la creación de 300 puestos de trabajo en España y retomar 300 empleos en Polonia".

No obstante, Fagor aclaró que el acuerdo con Cevital está "pendiente de la aceptación de la oferta de adquisición de la unidad productiva francesa por parte del tribunal competente" galo y está condicionada, además, a la adquisición de las marcas.

En el caso de que el juez no atendiera los argumentos de la Abogacía del Estado y aprobara la venta de las marcas de Fagor a Cevital, el Estado o cualquier otro acreedor podría presentar un recurso, lo que significaría un nuevo retraso en la operación.

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