_
_
_
_
_

Rosell apuesta por un “Nou Camp”

El futuro estadio “será cubierto y para 105.000 espectadores”, anuncia el portavoz Freixa

Viata aérea del Camp Nou.
Viata aérea del Camp Nou.SUSANNA SÀEZ

La junta directiva del FC Barcelona tomó ayer la decisión de construir un nuevo Camp Nou, que será cubierto y con capacidad para 105.000 espectadores, aunque aplazó la decisión sobre dónde estará ubicado, porque hay dos opciones sobre la mesa. La primera apunta a remodelar “en un 80%” la actual estructura del Camp Nou, según anunció Toni Freixa, el portavoz del ejecutivo azulgrana, tras la reunión que la junta mantuvo ayer por espacio de casi cinco horas; y la segunda apunta a levantar un estadio de nueva planta, detalle que deberá decidir el socio, según el planteamiento que le haga la junta “en la primera quincena del próximo año”.

El club, según expuso ayer el portavoz de la junta, que habló por boca de Sandro Rosell, está capacitado para emprender cualquiera de las dos obras. “No plantearemos un proyecto que ponga en peligro la opción económica, técnica o urbanística. Estamos preparados”, avisó Freixa. En cualquier caso, ayer no dio datos económicos al respecto —se especula con un coste de entre 400 y 600 millones de euros— pero los pormenores de los dos estudios técnicos que los miembros de la junta directiva conocieron ayer son tan complejos que requieren de mayores análisis, según advirtió Freixa, porque, añadió, “la decisión afectará la vida de nuestro club durante los próximos 50 años y hay que tomarla sin precipitarnos, aunque ya tengamos toda la información”.

Descartó el portavoz que la directiva esté dividida sobre la decisión. “No hay dos bandos en la junta, pero no hemos cerrado el debate porque exige de un gran análisis que debemos afrontar antes de plantearle una propuesta a los socios, que serán los que tomen la decisión sobre un tema de tal trascendencia”, dijo Freixa. Es voluntad de Rosell que la directiva llegue a un acuerdo unánime antes de traspasarle al socio la decisión sobre el referéndum a plantear para no generarle más dudas de las que de por sí supone el tema, complejo desde su propio planteamiento.

El socio decidirá si se reforma el actual campo en el 80% o se construye uno nuevo en otro lugar

“Estamos traspasando al socio una decisión que podríamos tomar nosotros”, convino ayer en su comparecencia ante los medios el portavoz de Rosell, que otorgó el derecho al socio para que se posicione, aunque de hecho, solo deba decidir si el nuevo estadio se ubicará donde esta el actual o en un nuevo terreno. Lo que está muy claro es que, como mínimo, será diferente al actual en un 80%, aunque mantenga su ubicación actual. “Estamos hablando de una obra de tal importancia que planteamos un estadio nuevo en el mismo emplazamiento sobre la actual estructura del Camp Nou”, según expuso ayer Freixa. El directivo añadió que esta opción no afectaría la vida deportiva del primer equipo ni a la presencia de los socios en los partidos.

La nueva ubicación, pendiente de confirmarse, remite a unos terrenos, a las puertas de la ciudad, en los límites con L’Hospitalet, en la zona que actualmente ocupan los campos deportivos propiedad de la Universidad de Barcelona.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Freixa, igualmente, anunció la voluntad de la junta que preside Rosell de construir un nuevo Palau Blau-Grana para uso de las secciones, con capacidad para 12.000 espectadores, que implicará el traslado del Mini-Estadi a los terrenos de la actual ciudad deportiva.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_