_
_
_
_
_

La oposición califica de “farsa” la comisión de investigación sanitaria

CiU y PSC aprueban, con la abstención de ERC, las conclusiones parlamentarias

Xavier Crespo, diputado de CiU.
Xavier Crespo, diputado de CiU.

El pleno del Parlament cerró ayer la comisión de investigación sobre las irregularidades destapadas en la sanidad pública en un ambiente de polarización. Mientras CiU y el PSC reiteraron una vez más su apoyo sin fisuras a los gestores del sistema en los últimos años, la mayoría de partidos de la oposición (ICV, Ciutadans, CUP y PP) tacharon la comisión de “farsa” y “ridículo absoluto” y votaron en contra de unas tibias conclusiones que no entran en el fondo de los casos investigados. Nacionalistas y socialistas aprobaron el texto final, que ni siquiera apoyaron los republicanos, que se abstuvieron. ERC censuró la “falta de autocrítica” de los dos partidos que, en su opinión, ha puesto de manifiesto la comisión.

“Hemos pasado de puntillas por los casos. La comisión no ha servido para restablecer la confianza de los ciudadanos”, sentenció Marc Vidal, diputado de ICV. “Es una farsa, un engaño a la ciudadanía”, abundó José Manuel Villegas, de Ciutadans. “El ridículo más grande que ha hecho CiU desde que estoy en el Parlament”, completó Isabel Vallet, de la CUP.

La mayoría de fuerzas admiten que esta confianza está debilitada tras el goteo de casos de corrupción e irregularidades

La oposición en bloque admitió que la comisión de investigación no ha servido para poner luz sobre los cuatro casos que se debían examinar: las relaciones entre el ente público Consorcio de Salud y Social de Cataluña (CSC) y el grupo Serhs, presidido por Ramon Bagó; el sobrecoste y los contratos del hospital de Sant Pau; las irregularidades en el holding municipal de Reus (Innova); y la gestión de la Corporación de Salud del Maresme y la Selva, en la que un informe —el llamado informe Crespo, por el diputado de CiU, Xavier Crespo, presente ayer en el pleno y exgestor del ente— de la Sindicatura de Cuentas destapó el desvío de cientos de miles de euros.

Para la oposición, las sesiones maratonianas de la comisión no han servido a uno de los propósitos principales que se habían marcado al inicio: restaurar la confianza de los ciudadanos en el sistema sanitario. La mayoría de fuerzas admiten que esta confianza está debilitada tras el goteo de casos de corrupción e irregularidades que han salido a la luz en los últimos años.

Para CiU, sin embargo, la principal conclusión de los trabajos de la comisión y de las miles de páginas de documentación aportadas por los entes sanitarios es que los ciudadanos deben estar tranquilos. “Los ciudadanos pueden seguir confiando en nuestro sistema de salud, que forma parte de nuestra estructura de Estado”, afirmó el diputado nacionalista Albert Batet. Jordi Terrades, del PSC, llamó a trabajar para que Cataluña “siga siendo referencia en el mundo de la salud”.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

ERC, por contra, manifestó que las conclusiones de la comisión no le satisfacen “en absoluto”, en palabras de la diputada Alba Vergès. “Solo se ha aprobado lo que CiU, PSC y PP han votado de manera conjunta”, criticó Vergès. El PP, que en las votaciones de la comisión tumbó la mayoría de conclusiones más duras, cargó ayer contra el texto final. El diputado Jordi Roca calificó la comisión de “fraude parlamentario”. “Acuso al régimen de ponernos en la lista de espera en favor de la construcción nacional”, dijo.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_