_
_
_
_
_
exposiciones

San Sebastián acoge las obras que El Paso creó para renovar el arte español

La muestra contiene obras de Rafael Canogar, Luis Feito, Juana Francés, Manolo Millares, Manuel Rivera, entre otros

San Sebastián -
Una de las obras que se muestra en la exposición sobre el grupo El Paso, en San Sebastián.
Una de las obras que se muestra en la exposición sobre el grupo El Paso, en San Sebastián.javier hernández

El grupo El Paso fue un revulsivo para el árido panorama artístico de la España que se abría a la segunda mitad del siglo XX. Algunas de las obras que nacieron de los pintores y escultores que la conformaron entre 1957 y 1960 se exponen desde mañana en la Sala Kubo de San Sebastián. El Paso. Abstracción y vanguardia mostrará hasta el 19 de enero un total de 45 lienzos y esculturas de Rafael Canogar, Luis Feito, Juana Francés, Manolo Millares, Manuel Rivera, Antonio Saura, Antonio Suárez, Manuel Viola, Pablo Serrano y Martín Chirino.

La exposición, comisariada por Dolores Durán, se completa con fotografías y diversa documentación, entre ella el manifiesto fundacional de El Paso, que escribió el crítico de arte José Ayllón y firmaron en marzo de 1957 en Madrid todos los artistas citados, excepto Chirino y Viola, que se incorporaron al grupo posteriormente.

"El Paso es una agrupación de artistas plásticos que se han reunido para vigorizar el arte contemporáneo español, que cuenta con tan brillantes antecedentes, pero que en el momento actual, falto de una crítica constructiva, de marchands, de salas de exposiciones que orienten al público y de unos aficionados que apoyen toda actividad renovadora, atraviesa una aguda crisis", decían en ese texto, al que siguieron otros 15.

Con la última comunicación, en mayo de 1960, escrita por Antonio Saura, pusieron fin a una aventura en la que no consiguieron implicar a músicos, arquitectos y literatos como parte de la "plástica revolucionaria global" que propugnaban, ha recordado hoy la comisaria, que ha presentado la exposición junto a la responsable de la Sala Kubo, Cristina Beloki, y el director de la Obra Social de la Kutxa, Carlos Ruiz.

Todos esos artistas, algunos de los cuales abandonaron el grupo antes de 1960, tuvieron luego una trayectoria individual reconocida, aunque en este caso se han seleccionado únicamente obras del periodo de actividad del grupo y de los años inmediatamente posteriores con el propósito de "extraer la esencia" del colectivo.

La abstracción es el común denominador de los trabajos de estos artistas, así como la influencia de las pinturas negras de Goya, que queda especialmente patente en Sueño goyesco, óleo de Manuel Viola de 1960 con el que se cierra el recorrido por la exposición.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

De las paredes de la Sala Kubo cuelgan también las telas de araña de Manuel Rivera que participaron en la Bienal de Venecia, uno de los espacios internacionales por los que pasaron estos creadores, que expusieron en el MoMA neoyorquino y en el Guggenheim y la galería Pierre Matisse, en la misma ciudad, y cuya última aparición colectiva fue en octubre de 1960 en la galería L'Attico de Roma.

De Saura se ha incluido además una Multitud de 1961, como recuerdo a la exposición monográfica que Kubo dedicó al artista hace una década, y de Feito, un artista al nunca le ha gustado hablar de su obra, tres óleos del último año del grupo en los que se encuentran luz y oscuridad.

De años posteriores, 1962 y 1964, son dos arpilleras del canario Manolo Millares, donde comienza a hacer aparición el color, apenas imperceptible en la otra pieza seleccionada, de 1959, dominada por el negro.

El color y los trazos negros comparten el espacio en los cuadros de Juana Francés -la única mujer del grupo, que tras abandonarlo regresó a él- y de Antonio Suárez. Más negra aún es la propuesta de Canogar. De Pablo Serrano, se exhiben tres obras de hierro y chapa, en las que recupera la tradición de Julio González, y de Chirino tres piezas de hierro forjado, dos de la cuales son de la colección del artista.

"Esta exposición pone de manifiesto la gran trascendencia que tuvo el grupo El Paso en el arte español de posguerra, cuyo rumbo ayudó a cambiar decisivamente", ha destacado Dolores Durán.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_