_
_
_
_
_

Las Vegas Sands presenta a la Comunidad su proyecto de Eurovegas

La documentación llega con tres meses de retraso y alivia al Gobierno de González

José Marcos
Sheldon Adelson, tercero por la izquierda, en Alcorcón en 2012.
Sheldon Adelson, tercero por la izquierda, en Alcorcón en 2012.COMUNIDAD DE MADRID

Andrew Tottenham, director general de Las Vegas Sands Corporation para Europa, acabó ayer con el runrún que en los últimos tres meses cuestionaba —reclutando a más adeptos conforme pasaban las semanas— la viabilidad de Eurovegas. Asentado en Londres, donde la multinacional estadounidense de casinos y centros de ocio tiene su sede en el Viejo Mundo, el representante de los intereses de Sheldon Adelson a este lado del Atlántico se presentó a primera hora de la mañana en el corazón de Madrid. En concreto, en el número 4 de la calle de Carretas, en la trasera de la Puerta del Sol, a apenas unos pasos de la sede del Gobierno regional. Bajo el brazo llevaba un proyecto con un título sugerente, Un sueño posible, que fue recibido como un balón de oxígeno por el Gobierno regional, por más que el propio Adelson, accionista principal de Las Vegas Sands, comunicara recientemente su intención inquebrantable de asentarse en Madrid.

Casi en el kilómetro cero, en el registro de la Consejería de Presidencia, Tottenham entregó una carta personal de Adelson y dos tomos de 326 páginas, confidenciales y en castellano, en las que Las Vegas Sands desgrana el proyecto que propone levantar en 750 hectáreas del Distrito Norte de Alcorcón. Desde entonces, su guardián es Salvador Victoria, el número dos de González y vicepresidente in pectore. Victoria puso especial celo en el cuidado de los dos volúmenes que, para el PP, pueden esconder uno de los motores para salir de la crisis, mientras la oposición solo ve casinos en el aire. Como el secretario general del PSM, Tomás Gómez, que tres semanas atrás afirmó que Eurovegas “se había caído”. “No creemos ni intuimos, sabemos”, aseguró. En su lugar, el que ayer mantuvo la tesis de que no habrá casino fue el diputado socialista Antonio Carmona. “Es una montaña de humo, de entrada porque es un proyecto no vinculante. Las Vegas Sands ha reconocido ante la SEC [la agencia federal de Estados Unidos encargada de la supervisión de los mercados financieros] que no puede asegurar que podrá obtener toda la financiación requerida para la construcción y la apertura de los proyectos planeados en las condiciones adecuadas”, afirmó Carmona, mientras el líder del PSM guardaba silencio.

El Ejecutivo regional lo va a estudiar ahora para ver si cumple la legislación. Luego, convocará un obligado concurso, si bien sería una sorpresa que el proceso se tumbara y no siguiera su curso. El Gobierno madrileño ha hecho numerosas modificaciones con este fin. Es lo que PSM, IU y UPyD llaman un “traje fiscal y legislativo a medida”. Las cifras del proyecto son colosales. “Se prevé la instalación, al final de las tres fases en 2020, de 12 hoteles con 36.000 habitaciones, lo que capacitará a Madrid a afrontar un turismo potencial de 80 millones de viajeros”, expresó el presidente regional, Ignacio González. También de tres campos de golf, seis casinos, siete teatros con capacidad para unos 6.000 espectadores y un pabellón para 20.000.

El presidente autonómico se mostró ayer especialmente prudente, por más que la jornada le había favorecido con creces tras conocerse el descenso del número de parados (39.400 desempleados menos) o que el día anterior el Tribunal Superior de Justicia de Madrid tumbara un recurso del PSM que paralizaba la privatización de la gestión de una decena de hospitales. Pese al escenario, González estuvo alejado del optimismo que le llevó en febrero a poner unos plazos a Eurovegas. “El concurso público será hacia el mes de abril, para que esté ya resuelto en verano, en septiembre, y así se inicien las obras. La colocación de la primera piedra será a finales de año o, a más tardar, en enero de 2014”, expresó entonces, en el acto en el que Las Vegas Sands se decantó formalmente por Alcorcón como sede de su megacentro de ocio y reuniones. Michael Leven, consejero delegado y segundo de la firma por detrás únicamente de Adelson, no corrigió la predicción del dirigente autonómico, que ayer mostró que había aprendido la lección.

Para alivio de González, el estudio de viabilidad del megacomplejo de casinos y congresos llegó tras una demora de tres meses que se empezaban a indigestar a la Comunidad. Mientras se alimentaban las dudas sobre la financiación de la inversión, de 17.000 millones de euros. De estos, unos 6.000 corresponderían al primer tercio de Eurovegas. Las obras supondrían la creación de 25.000 empleos en la construcción y dejarían 75.000 en el sector servicios para 2016. Las 12.000 habitaciones que para entonces existirían multiplican por seis la capacidad hotelera del Palazzo y The Venetian, los buques insignias de Adelson en pleno Las Vegas.

“Aparte de duplicar los 9,8 millones de turistas de 2012 y de ser el centro de convenciones del sur de Europa, [Eurovegas] también favorecerá a Madrid 2020 al incrementar de forma notable la capacidad hotelera regional, con 51.000 habitaciones actuales. Esto nos daría el mismo número de habitaciones que Tokio”, abundó sobre la competidora directa por los Juegos de dentro de siete años el barón popular. Afirmó, además, que solo el 5% del espacio se destinará a casinos. De ser así —Leven dijo en marzo que el juego representará el 15% del negocio—, el porcentaje sería casi idéntico al que el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, defendía el verano pasado.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

A la espera de que Rajoy permita fumar

El movimiento de Las Vegas Sands, que presentó su plan de viabilidad tras dejarse querer meses, otorga ahora al Gobierno de Mariano Rajoy buena parte de la responsabilidad en las futuras negociaciones, por no decir toda. Mientras la Comunidad ha cumplido con todas las demandas de Sheldon Adelson, el Estado —las negociaciones se iniciaron en la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero— todavía no se ha pronunciado de forma oficial, o al menos en público, sobre la principal reclamación de la mayor empresa hotelera y de casinos del mundo: que se pueda fumar en sus instalaciones. “El tabaco no está prohibido en España. Entendemos que se puede establecer una normativa ajustada para que sea posible hacerlo en determinados ámbitos, aplicándose un margen”, volvió a posicionarse a las claras Ignacio González.

Las reuniones que Rajoy ha mantenido con Adelson en La Moncloa, en octubre de 2012 y el pasado mayo, no han dejado del todo resuelta la reivindicación del inversor. De ahí, explican fuentes de la negociación, el cariz de informe “no vinculante” presentado por la firma, a la espera de una solución futura.

A Adelson también le preocupan, aunque en menor medida, otras normativas como la ley estatal de prevención de blanqueo de capitales. El empresario quiere que solo se obligue a identificar al cliente a la entrada del casino y cuando quiera comprar o cambiar fichas por valor superior a 2.000 euros (un umbral que así mismo desea cambiar). Eso eliminaría el requisito de hacerlo también cuando el jugador transfiere al casino fondos para poder apostar, el modo habitual de aquellos que juegan cantidades muy elevadas. También reclama que los menores de edad puedan pasar por los casinos. Algo obligado en los hoteles de Las Vegas, donde mesas de póquer, tragaperras, centros de apuestas deportivas, restaurantes, tiendas y consigna se mezclan en el hall.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

José Marcos
Redactor de Nacional desde 2015, especializado en PSOE y Gobierno. Previamente informó del Gobierno regional y casos de corrupción en Madrid, tras ocho años en Deportes. Es licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster de Periodismo de EL PAÍS. Trabajó en Starmedia, Onda Imefe y el semanario La Clave.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_