_
_
_
_
_

Isidro Fainé apela al diálogo entre Cataluña y España “dentro de la ley”

El presidente de CaixaBank asegura que aprecia “voluntad de concordia”

Lluís Pellicer
El presidente (i) y el consejero delegado de CaixaBank.
El presidente (i) y el consejero delegado de CaixaBank.G. NACARINO (REUTERS)

El presidente de CaixaBank, Isidro Fainé, se unió ayer a las voces empresariales que reclaman diálogo y respeto a la legalidad a los gobiernos central y catalán ante el proceso soberanista abierto en Cataluña. A pesar de que Fainé quiso dejar claro que la entidad no interviene en el debate político, Fainé afirmó que confía “plenamente” en “el diálogo” de los líderes políticos. “Yo solo entiendo el diálogo, el acuerdo, el consenso, dentro del marco de la ley”, afirmó ante las sucesivas preguntas de los periodistas en la presentación de resultados de la entidad.

Las palabras de Fainé están en la línea de lo que han expuesto en público y en privado hasta ahora la mayoría de las grandes multinacionales catalanas y la gran patronal, Fomento del Trabajo. La opinión de las dos principales entidades financieras catalanas —CaixaBank y Banco Sabadell— ha llegado coincidiendo con las ruedas de prensa para exponer los resultados de 2012. El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, hizo suyas las palabras del jefe de la patronal, Joaquim Gay de Montellà, quien instó a los ejecutivos central y catalán a recuperar la negociación del pacto fiscal como alternativa a la vía soberanista que ha abierto Mas y evitar un “choque de trenes” que el empresariado quiere evitar a toda costa.

Ayer, no obstante, Fainé se mostró optimista. “Veo voluntad de concordia. Vi ayer la televisión y me parecía que había voluntad de concordia, que se palpaba”, dijo Fainé en referencia a la reunión que mantuvieron Mas y el Rey anteayer en el Palacio de la Zarzuela. El presidente de CaixaBank agregó que “el consenso es bueno para todos los ciudadanos, catalanes y no catalanes”, y reiteró que ve en los gobiernos de Madrid y Barcelona “ganas de dialogar”, pero que para que ello se produzca se requiere que todos quieran hacerlo. “Vamos por el buen camino”, zanjó.

El presidente de la primera entidad bancaria española —con unos activos de 348.294 millones de euros y una cuota de mercado del 14,6%— aseguró que mantiene una buena relación con el Gobierno de la Generalitat. “Nosotros tenemos siempre muy buenas relaciones con todas las Administraciones. Es nuestra manera de ser”, sostuvo Fainé, que recordó que su objetivo es “servir a la sociedad”. El presidente de CaixaBank, en cambio, no quiso pronunciarse sobre el impuesto sobre los depósitos bancarios que pactaron CiU y ERC para recaudar 500 millones de euros y que ha quedado suspendido por el Tribunal Constitucional. Las patronales bancarias y varios ejecutivos del sector ya arremetieron contra el tributo, que consideraron que dificultaría el crédito en plena recesión. Al respecto, Fainé se limitó a recordar que ese gravamen actualmente está recurrido.

El presidente de la entidad catalana también evitó pronunciarse sobre los casos de corrupción, en concreto sobre el caso Bárcenas. “Tenemos tanto trabajo que solo faltaría que tuviera que ocuparme de los escándalos que van saliendo”, dijo. “Creo en las instituciones y en la justicia (...) No soy nadie para juzgar estas cosas”, remachó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Lluís Pellicer
Es jefe de sección de Economía de EL PAÍS, donde ha desarrollado la mayor parte de su carrera. Ha sido corresponsal en Bruselas entre 2018 y 2021 y redactor de Economía en Barcelona, donde cubrió la crisis inmobiliaria de 2008. Licenciado en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, ha cursado el programa de desarrollo directivo de IESE.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_