_
_
_
_
_

El juez investiga los regalos de Navidad realizados por Emarsa de 2004 a 2008

La sociedad pública gastó decenas de miles de euros en joyas y otros obsequios La nueva documentación puede revelar quiénes fueron los destinatarios de los presentes

Ignacio Zafra

El juez instructor del caso Emarsa, que investiga el saqueo sufrido por la sociedad pública que gestionaba la depuradora de Valencia, acordó en un auto conocido este martes integrar en la causa seis apartados de documentación que llevan por título “Regalos Navidad” y el año al que hacen referencia, desde 2004 a 2008. El magistrado Vicente Ríos rechazó el recurso presentado por uno de los principales imputados, el exvicepresidente de la Diputación de Valencia y exalcalde popular de Manises, Enrique Crespo, que había solicitado mantener fuera de la investigación parte de la documentación intervenida en Emarsa.

Los nuevos documentos pueden deparar sorpresas. La sociedad gastó decenas de miles de euros en la adquisición de los productos más extravagantes tratándose de una planta depuradora de aguas residuales; desde joyas hasta accesorios de automóvil. Y han trascendido indicios de regalos a distintos cargos públicos, como la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, y su vicealcalde Alfonso Grau (en concreto, un jamón cinco jotas).

La referencia al obsequio a Grau se halló en una anotación de la agenda del exgerente de Emarsa y excargo del PP en la ciudad de Valencia, Esteban Cuesta. En el caso de Barberá, se trató de una carta de agradecimiento tras la aparente recepción del presente. La nueva remesa de regalos parece tener, sin embargo, un carácter más amplio. Ya se conoce, porque al inicio de la investigación fueron trascendiendo las facturas, que Emarsa compró bolígrafos de lujo, aparatos electrónicos, lotería y artículos de bebé, además de viajes de placer con todos los gastos pagados a distintos lugares del mundo y comidas en cenas en restaurantes caros y marisquerías. La novedad es que quizá ahora se conozcan también destinatarios de los mismos ajenos al personal de la planta depuradora.

El juez instructor también reafirmó la incorporación de las agendas de Crespo y Cuesta a la causa, después de que el primero hubiera reclamado la devolución de los “efectos recogidos y que de manera irregular han estado bajo del control de la entidad Emshi”. En la sopa de siglas que también es este caso, la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi), constituida por una asamblea de municipios del área metropolitana de Valenciana, era propietaria de Emarsa. Y el presidente de Emshi (durante años Crespo) lo era a su vez de Emarsa.

El magistrado admitió en su momento dejar fuera de la causa parte de la documentación recogida por la Emshi y atribuida a Cuesta al considerar que podía invadir su intimidad y que no arrojaba luz a la investigación. En el caso de Crespo, en cambio, el juez rechaza su petición señalando, de entrada, que la petición no había sido realizada por el cauce legal apropiado.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Ignacio Zafra
Es redactor de la sección de Sociedad del diario EL PAÍS y está especializado en temas de política educativa. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Valencia y Máster de periodismo por la Universidad Autónoma de Madrid y EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_