Gipuzkoa aprueba el impuesto a los ricos con el apoyo de Bildu y los socialistas

Las Juntas Generales de Gipuzkoa han aprobado hoy, con los votos a favor de Bildu, PSE-EE y Aralar, la norma foral que regula el nuevo Impuesto sobre la Riqueza y las Grandes Fortunas (IRGF), que ha sido rechazado por el PNV y los populares. De este modo, se ha consumado el acuerdo que en materia fiscal siguen manteniendo el Gobierno foral de Bildu y los socialistas, que hace un año también pactaron la reforma del IRPF.

El impuesto a los ricos, que entrará en vigor en enero próximo, sustituye al de Patrimonio y afectará a unos 7.000 contribuyentes, el 1,7% del total, según datos de Hacienda. El fisco guipuzcoano ingresará por este tributo 44,6 millones de euros. La diputada del ramo, Helena Franco, ha justificado su aprobación en aras de lograr un sistema fiscal "más progresivo", en el que se tributará "en función de la riqueza real".

Este nuevo gravamen mantiene el mismo límite exento que el de Patrimonio, 700.000 euros, y una exención de 300.000 euros por la vivienda habitual. En cambio, incluye los bienes y derechos afectos a actividades económicas y participaciones en determinadas entidades, hasta ahora exentos, y que fue uno de los puntos más criticados por PNV y PP.

Franco ha asegurado que del total de contribuyentes que deberán tributar por este concepto, el 0,03% (unas 120 personas) tienen un patrimonio que supera los diez millones de euros. La diputada ha aportado este dato para contrarrestar la crítica de peneuvistas y populares por el "castigo" que el nuevo impuesto supone para la clase empresarial de Gipuzkoa.

Alrededor de 120 guipuzcoanos tienen patrimonios superiores a 10 millones de euros

El juntero de Bildu Enrique Martínez Flórez ha afirmado que el IRGF es "moderno y eficaz", quizás "el más eficiente de todos los que participan de esta naturaleza en nuestro entorno". La portavoz del PSE, Rafaela Romero, ha defendido la "coherencia" de su grupo con su política fiscal tanto a nivel nacional como en el País Vasco, y ha mostrado su convencimiento de que su aprobación servirá para "generar empleo, impulsar las pymes y mejorar la economía". Juan Carlos Cano, del PP, ha afirmado que el IRGF "ataca a la línea de flotación del tejido productivo guipuzcoano". Y Rebeka Ubera, de Aralar, ha valorado "muy positivamente" el "cambio de rumbo" del Gobierno foral de Bildu hacia una "verdadera progresividad" fiscal.

En la misma sesión también se ha sancionado la norma foral por la que se crea el Registro de Obligados Tributarios de Especial Riesgo (ROTER). Ha salido adelante con los votos de Bildu, PSE-EE y Aralar, mientras el PP y PNV se han abstenido.