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El gasto en sillas en el Gaiás se rebaja un 73% en siete años

En 2005 el Gobierno de Manuel Fraga, con Jesús Pérez Varela como conselleiro de Cultura, encargó las sillas para el primer edificio de la Cidade da Cultura

En 2005 el Gobierno de Manuel Fraga, con Jesús Pérez Varela como conselleiro de Cultura, encargó las sillas para el primer edificio de la Cidade da Cultura. Entonces, dos días antes de las elecciones que lo sacarían de la Xunta, el Gobierno del PP reflejaba en el Boletín Oficial del Estado que estaba dispuesto a gastarse 933 euros por asiento. Ahora, siete años y una crisis después, pese a la inflación acumulada, otro gobierno del PP comprará las 177 sillas del tercer edificio del complejo por unos 240 euros cada una.

El ahorro en siete años es de 700 euros, un 73%. O, lo que es lo mismo, entonces la Administración estaba dispuesta a pagar cuatro veces más por material similar. En este tiempo se ha ido rebajando el precio inicialmente previsto para el mobiliario del Gaiás. De los 933 euros de la licitación de 2005 para el Archivo se pasó a unos 600 euros en su adjudicación final. En 2010 se licitaron las sillas de la Biblioteca por 510 euros y se adjudicaron por 350. También ahora la adjudicación de las sillas para los Servicios Centrales caerá con respecto a los 333 euros con que se licitaron hace dos meses.

Ayer se desvelaron las ofertas económicas del tercer lote de mobiliario. A falta de que los técnicos calculen las puntuaciones técnicas y económicas de las empresas presentadas para saber cuál ganará, ya se sabe que los precios de todas son inferiores a 250 euros por silla. De las siete ofertas presentadas la mayoría rondan los 240 euros y dos deberán justificar que sus propuestas de 205 euros no son una baja temeraria.

Polémica apertura

La apertura de ofertas de ayer, como hace dos años, también tuvo polémica. En 2010 un sobre que debía estar lacrado con las ofertas secretas en su interior apareció abierto. Ayer, una de las empresas presentó dos ofertas económicas distintas para el suministro de las butacas que acompañan a las sillas. La mesa de contratación permitió al representante de la firma que, sobre la marcha, eligiese con cuál de las dos quería participar. Eligió la más barata, lo que provocó quejas del resto de empresas ya que eso le dará mejor puntuación en el concurso.

Las 284 butacas que se comprarán para el edificio de Servicios Centrales costarán finalmente unos 350 euros cada una, frente a los 590 euros que supusieron en 2010 las de la Biblioteca.<TB>

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