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Una empresa del segundo de Cultura cobró de una fundación que dirigía

Xavier Solà era entonces concejal de Urbanismo de Vic, director de la entidad que promovía los pisos y accionista de la sociedad gestora

Una empresa de Josep Maria Matas, recién destituido coordinador general de la Diputación de Barcelona, y Xavier Solà, actual secretario general del Departamento de Cultura, cobró en los primeros meses de 2010 más de 50.000 euros por la gestión de unos pisos de protección oficial en Vic promovidos por la Fundación Privada de Vivienda Pública de Cataluña (FPHP) de la Asociación Catalana de Municipios y Comarcas (ACM), cuando ambos ocupaban cargos directivos en la entidad municipalista. Tanto Matas como Solà son dirigentes de CDC en Osona, donde el primero es su presidente comarcal.

Xavier Solà.
Xavier Solà.

Por aquel entonces, Matas era secretario general de la ACM y apoderado de la FPHP, y Solà, que había sido jefe de los servicios jurídicos de la ACM (2000-2007), era concejal de Urbanismo de Vic y director de la FPHP.

La empresa —Procomu Habitatges, SL, dedicada al sector de la construcción— se creó en Barcelona el 16 de abril de 2009. Además de Matas y Solà, había un tercer socio, Salvador Cuadreny, un abogado barcelonés vinculado a CiU que era secretario y abogado de la FPHP y que fue nombrado administrador único de la sociedad.

En declaraciones a EL PAÍS, Solà aseguró ayer que es consciente de que Procomu era una empresa privada y fundamentó su creación en que “la fundación, que quería realizar vivienda social, necesitaba una gestora”. También dijo que lo que se buscaba era agilizar los trámites burocráticos y justificó la presencia de los tres socios fundadores por sus cargos en la FPHP.

Matas fue destituido de ese cargo el 24 de febrero a raíz de las informaciones de EL PAÍS sobre las irregularidades cometidas
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Expertos consultados aseguran que la presencia de Solà en Procomu puede comportar incompatiblidad con los cargos públicos que ejercía. El afectado, sin embargo, asegura no observar incompatibilidad alguna.

En 2008, un año antes de la creación de Procomu, se fundaron Impulsvic (empresa pública para la gestión del patrimonio del suelo y la vivienda en Vic) y la FPHP, una entidad dependiente de la ACM sin ánimo de lucro que promueve vivienda de protección oficial.

Josep Maria Matas.
Josep Maria Matas.

El 16 de julio de 2009, tres meses después de crearse Procomu Habitatges, SL, Josep Maria Vila d’Abadal, alcalde y presidente de ImpulsVic, y Salvador Esteve, presidente de la ACM, firmaron un convenio por el que el Ayuntamiento de Vic vendía a la FPHP unos terrenos en el barrio de Serra-de-senferm para que construyera 17 pisos de protección oficial para jóvenes. El 22 de diciembre, cinco meses después de la firma del convenio en Vic, la FPHP firmó tres contratos. El primero era de prestación de servicios y lo suscribieron la ACM y Procomu Habitatges.

Según este acuerdo, Procomu se encargaría de gestionar las promociones inmobiliarias de la ACM y podría subcontratar las gestiones oportunas. Un segundo contrato de prestación de servicios con Procomu iba destinado a la construcción de las viviendas de Vic. En ambos casos firmaron Matas, como apoderado de la FPHP, y Cuadreny, como representante de Procomu Habitatges. El tercer acuerdo se firmó con Projectes Minamb Quattro, SL. Se trataba de la oferta de servicios técnicos de Project Management para la construcción de los pisos de Vic. El contrato fue rubricado por Matas y Josep Escoda, administrador único de esta empresa.

Medio año antes, el 25 de junio, Escoda había sido nombrado para el citado cargo en sustitución de Cuadreny, pues este, que era uno de sus tres socios fundadores, le había vendido sus acciones.

En el primero de los acuerdos se estipulaba, en concepto de honorarios, un máximo del 15% del coste total de la promoción. En los dos otros contratos era de un 7,5%.

Así, Matas firmó en nombre de la FPHP un acuerdo con una empresa de la que era copropietario, y Cuadreny era socio de una y exsocio de la otra. Solà, por su parte, era concejal de Urbanismo de Vic, director de la FPHP y copropietario de Procomu.

Matas firmó en nombre de la FPHP un acuerdo con una empresa de la que era copropietario

Solà asegura que la presencia de Minamb Quattro se explica porque necesitaban externalizar el trabajo. “Nos dimos cuenta de que no sabíamos sobre la construcción de pisos, así que lo pasamos a una empresa que supiera hacerlo”, afirma. Por su parte, Cuadreny admite que, a pesar de que realizaban trabajos diferentes, “se podrían haber hecho desde la misma empresa”.

Desde un principio la asociación de vecinos de la Serra-de-senferm mostró su oposición a los pisos e incluso advirtió de que no había un plan de viabilidad. Pero sus quejas cayeron en saco roto pues el 19 de octubre de 2010, poco antes de las elecciones catalanas, se colocó la primera piedra de los pisos, construcción que se encargó a Teyco, compañía próxima a CiU. “Es un acto insólito en estos tiempos”, admitió aquel día Salvador Esteve, presidente de la ACM, a la prensa.

Entre 2010 y principios de 2011, Procomu giró 119.000 euros (en nueve facturas) por la “gestión integral de la FPHP”. Minamb Quattro, por su parte, facturó en 2010 un total de 127.095 euros en 12 pagos por la "dirección, coordinación y desarrollo del proyecto de Vic". Aquel año también se pagaron 12.120 euros a Solà por la dirección de la FPHP.

Solà y Matas vendieron sus participaciones en Procomu a Escoda —que se quedó como accionista con Cuadreny— el 29 de abril de 2010. Sin embargo, tres de las facturas de Promocu, que ascienden a 55.245 euros, son anteriores a la venta de las acciones. Solà, no obstante, asegura que no se lucró con Procomu. “Nunca cobré dinero por ser accionista de la empresa y desconocía estos pagos porque la responsabilidad económica era de Matas, apoderado de la fundación”, afirma.

En diciembre de 2010 Solà se convirtió en secretario general de Cultura y el pasado julio Matas fue nombrado coordinador general de la Diputación de Barcelona. Matas fue destituido de ese cargo el 24 de febrero a raíz de las informaciones de EL PAÍS sobre las irregularidades cometidas mientras era su secretario general. No obstante, es una persona muy querida en el partido. Oriol Pujol expresó su apoyo a Matas en una cena con dirigentes de CDC que se celebró el pasado martes en Vic.

Cerca de allí, las obras en Serra-de-senferm, que debían haber finalizado a principios de 2012, están suspendidas desde el pasado verano. Una fuente de la ACM admitió en diciembre que se había devuelto el dinero a los que realizaron el primer pago. No se sabe qué pasará con los pisos, pero si se reanudan las obras será sin Procomu, pues Cuadreny disolvió la empresa el 24 de octubre, cuatro días antes de que Matas, tras 11 años en el cargo, fuera relevado como secretario general de la ACM.

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