La Caja Mágica confía en la Fórmula 1 tras el adiós de la Federación de Tenis

El Ayuntamiento de Madrid negocia con el equipo de Fórmula 1 español HRT para alquilarle parte de las instalaciones cubiertas de la Caja Mágica, la infraestructura más importante de los sucesivos proyectos olímpicos de la capital y también la más difícil de justificar ante la ciudadanía: hasta el año pasado, servía de sede al equipo de baloncesto del Real Madrid, que se trasladó por motivos económicos y sentimentales al Palacio de Deportes; y albergaba clases a jóvenes de la Federación Madrileña de Tenis, que rescindió en diciembre el convenio por un desacuerdo económico. La infraestructura es ahora un bellísimo y carísimo barco fantasma. La Fórmula 1 podría, de fructificar las negociaciones, salvar el aspecto económico, pero el Ayuntamiento no ha explicado aún si sería a costa de hurtar ese espacio a posibles usos deportivos de los madrileños.

Diseñada por Dominique Perrault, la Caja Mágica costó 294 millones (más del doble del presupuesto inicial) y se inauguró hace dos años como buque insignia de la candidatura de Madrid 2016. Pensada para deportes de raqueta, cuenta con tres grandes pistas para 12.442, 3.194 y 2.730 espectadores. En junio de 2010, el Real Madrid firmó un convenio de cinco años (a razón de 1,1 millones cada uno) para instalar allí a su equipo de baloncesto; sin embargo, apenas un año después se mudó al Palacio de Deportes. En primer lugar, porque en esa instalación, propiedad de la Comunidad de Madrid, se ahorraba el alquiler. Y porque a sus seguidores nunca les gustó la Caja Mágica.

Situado en el barrio de San Fermín Orcasur, en el distrito de Usera, junto a la M-30, presenta problemas de acceso en transporte público y de aparcamiento para los vehículos particulares. Pero sobre todo, carece del cariño de los aficionados. De los 10.434 espectadores de media en el Palacio de Vistalegre (el coso taurino reconvertido en cancha, en Carabanchel, y sede madridista por seis años) durante la temporada 2009-2010 se pasó a cerca de 6.000 en la siguiente (menos de la mitad del aforo). Se han seguido jugando allí los partidos de la primera fase de la presente Euroliga, pero el Madrid ya ha dicho adiós definitivamente a la Caja Mágica.

Quedó como principal inquilina la Federación Madrileña de Tenis, que empleaba cinco pistas interiores y 16 exteriores para dar clases. Pero el pasado 31 de diciembre se rescindió de forma conjunta el convenio, según el Ayuntamiento porque la federación no tenía dinero para seguir abonando el alquiler. Fuentes municipales han indicado que se busca a un nuevo gestor para mantener esas clases de tenis a jóvenes, a los que entre tanto ha cedido de forma gratuita las 16 exteriores del recinto.

La Federación Madrileña de Tenis aduce sin embargo que el Ayuntamiento “cambió sus exigencias”. “Querían sacar más rendimiento económico. Y no pudimos llegar a un acuerdo”, aseguró a este diario su presidente, Miguel Díaz. “Nosotros les presentamos un proyecto que suponía cubrir los gastos de nuestra actividad y una pequeña cantidad al año por arrendamiento. No podíamos ofrecer mucho más porque la actividad no es rentable económicamente. Los únicos ingresos son los precios de los cursos y los alquileres de las pistas”, explica Díaz.

“Para nosotros, aunque suponía un gasto, tenía un valor social. Hay 500 niños en la escuela, en torno al 90% de los cuales son de Villaverde, que no cuenta con instalaciones de este nivel”, indica. A su juicio, "ha primado el tema económico" en la negociación con el Ayuntamiento. "Nosotros no podemos asumir más gastos", sentencia. "La escuela, gracias al acuerdo al que hemos llegado con el Ayuntamiento, seguirá hasta el 31 de marzo. Pero hoy ya hemos empezado a sacar nuestras cosas de allí", indica el presidente de la federación madrileña, que cuenta con 19.600 aficionados, la segunda más grande de España después de la catalana.

En la Caja Mágica hay además 12 pistas interiores y 2 exteriores de pádel; 2 pistas de tenis, 1 piscina de 25x12,5 metros, 1 gimnasio, 3 salas de fitness, 3 jacuzzis, sauna y baño turco. Estas instalaciones están a disposición de los vecinos, o lo estarán, porque en la actualidad las pistas de paddle están en obras (se abrirán, según fuentes municipales, en dos semanas), como también lo está la piscina (sin fecha prevista de apertura).

La instalación se emplea puntualmente para organizar otros eventos de carácter deportivo, comercial y cultural (albergó los premios musicales de la MTV). Pero la marcha de la Federación Española de Tenis, conocida hoy, ha supuesto un golpe en su línea de flotación, tanto a nivel económico como respecto a su servicio a los ciudadanos.

Por si fuera poco, el Comité Olímpico Internacional valora especialmente que las infraestructuras construidas para los Juegos reviertan luego para beneficio de la ciudad y no se conviertan en lo que en su argot se conoce como “elefante blanco”. El Comité Olímpico Español, que encabeza la candidatura de Madrid 2020, ha declinado comentar los problemas por los que atraviesa la Caja Mágica, pero fuentes conocedoras de los entresijos olímpicos han recordado que el uso que se de a las instalaciones no tiene por qué ser exclusivamente deportivo.

Y ahí es donde entra en escena la Fórmula 1. Según el Ayuntamiento, el equipo HRT se dirigió a ellos “hace un tiempo, interesados en instalar “sus oficinas y el equipo de ingeniería e I+D” en la Caja Mágica. Desde entonces se está en conversaciones, aunque aún no existe ni siquiera un preacuerdo. La escudería HRT (anteriormente conocida como Hispania) ha confirmado las negociaciones. Hasta ahora repartía su sede de forma casi itinerante entre Alemania y Murcia; tenía pensado trasladarse a uno de los pabellones usados para la Copa del América de vela en Valencia, pero ahora las fuentes consultadas señalan estar más interesadas en mudarse a Madrid, según informa Oriol Puigdemont.

En ningún caso ocuparían todo el edificio, pero sí gran parte de él, puesto que instalarían allí todos su equipo técnico y de desarrollo del monoplaza. La escudería, que pertenece al Grupo Thesan, cuenta con Luis Pérez Sala como director deportivo, y con Pedro Martínez de la Rosa como uno de sus dos pilotos (el otro no está elegido aún). El Mundial de Fórmula 1 comienza el próximo 18 de marzo en Australia, pero el equipo, que realizará entrenamientos la próxima semana en Jerez, espera cerrar el asunto de sus instalaciones antes de un mes. En 2011, el HRT terminó en el puesto 11º de 13 en la clasificación de constructores.