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La oposición rechaza los privilegios para la ciudad del juego

"Sería un paraíso fiscal rozando la esclavitud laboral", según el socialista José Quintana "Todo lo que sea inversión es algo muy positivo", sostiene el popular Henríquez de Luna Lissavetzky lo compara a un nuevo 'bienvenido, mister Marshall'

Sheldon Adelson, frente a las obras de su casino en Singapur.
Sheldon Adelson, frente a las obras de su casino en Singapur. TIM CHONG (CORDON PRESS)

La oposición en la Asamblea de Madrid -PSOE, IU y UPyD- han rechazado que el Ejecutivo regional otorgue privilegios a un multimillonario estadounidense, Sheldon Adelson, para la construcción de un macrocomplejo de casinos, hoteles y ocio en la región, mientras que el PP ha asegurado que no supondría "barra libre" en el cumplimiento de la ley. Esperanza Aguirre confirmó ayer que mantiene contactos con el nuevo Gobierno y con la alcaldesa con la intención de “cambiar todas las normas que haya que cambiar” dentro de sus “valores y principios”. Su idea es crear “una isla” legislativa y fiscal para el macrocasino.

El diputado socialista José Quintana ha destacado, tras la Junta de Portavoces de la Asamblea, que el proyecto planteado para ese gran complejo, basado fundamentalmente en el juego, prevé incluso "un compromiso de suelo gratis", mientras se deja de invertir en Educación o Salud. Ha sostenido que "no se puede admitir este tipo de política", y menos, en crisis. "Sería un paraíso fiscal rozando la esclavitud laboral", ha añadido.

La diputada de IU Eulalia Vaquero ha explicado que su formación se opone "no sólo al invento en sí mismo", que les preocupa, sino "a la forma en la que el Gobierno regional piensa llevarlo a cabo, saltándose todos los límites, regulaciones y normativas habidas y por haber", lo que ha considerado "una irresponsabilidad". "Cualquier proyecto que pueda alterar el tema territorial, medioambiental o de infraestructuras debería ser consensuado de manera más rigurosa y con mucha más información", ha agregado, para concluir diciendo: "De entrada, así, no".

Luis de Velasco, de portavoz de UPyD, ha afirmado que no le gusta "ni el proyecto ni la finalidad", ya que se trata de un empresario que lidera el negocio de juego en Estados Unidos y en la isla de Macao. Ha expresado su rechazo a que se prevean "excepciones legislativas en temas que van desde el Estatuto de los Trabajadores hasta los horarios comerciales o la ley del tabaco".  "Se trata de establecer la república independiente del juego", ha sostenido, al tiempo que se ha preguntado si se crearían los 200.000 empleos prometidos y cuál sería su calidad.

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Frente a todos ellos, el portavoz del grupo popular, Iñigo Henríquez de Luna, ha defendido los supuestos 200.000 puestos de trabajo directos y que "todo lo que sea inversión, sobre todo extranjera, es algo muy positivo". "Seguro que otras autónomas estarían deseando acoger una inversión multimillonaria como ésta", ha añadido, para matizar que las "facilidades" que se prevé otorgar "no significan barra libre y que se obvie el cumplimiento de la ley, como ayer dejaron claro la presidenta y la alcaldesa".

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"Una cosa es que se ayude, se apoye y se flexibilicen algunas cuestiones administrativas, y otra cosa es pasar por encima de los principios que defiende el PP en las instituciones", ha agregado. El portavoz popular ha sostenido que "cualquier instalación pequeña o mediana  recibe apoyo y ayudas institucionales por parte del ayuntamiento" correspondiente, ya que "todas las administraciones compiten en un mercado global".

La oposición en el Ayuntamiento de Madrid ha coincidido también en rechazar de plano el proyecto del inversor estadounidense. El portavoz del Partido Socialista de Madrid, Jaime Lissavetzky, resaltó que las Administraciones “no se pueden saltar a la torera” la legislación para sacar adelante esta “gran ciudad del ocio”, según informa Efe. “Esto no es Montecarlo ni Las Vegas; esto es Madrid, capital de España, donde la cultura atrae muchísimo al turismo y no vamos a hacer una especie de Disneylandia”, ha añadido.

Izquierda Unida preguntará en el pleno municipal de la semana que viene por este proyecto, que considera una “ofensa” para las autoridades y la clase trabajadora española, al considerar que “sigue el modelo estadounidense para sus países satélite”. El portavoz municipal de Unión Progreso y Democracia, David Ortega, ha dicho: “No nos gusta este proyecto porque nuestro concepto de ciudad dista mucho de Las Vegas, Singapur o Macao. Las inversiones en Madrid deben de ir por otra línea, no la del juego y todo lo que le rodea”.

El secretario general de UGT en Madrid, José Ricardo Martínez, señaló que la empresa estadounidense “no puede quebrar el ordenamiento laboral que ha exigido un esfuerzo ímprobo por parte de los agentes sociales y los partidos políticos”. “Los principios democráticos españoles son firmes y nadie los puede trastocar a su capricho”, ha explicado mediante un comunicado.

Los técnicos del Ministerio de Hacienda agrupados en el sindicato Gestha ido más allá al advertir de que el proyecto supone “un auténtico paraíso fiscal en el corazón de España”, que abriría la puerta al lavado de dinero negro en los casino. Su presidente, Carlos Cruzado, indicó que la creación de puestos de trabajo que apareja un plan así siempre es bienvenida, pero “no a cualquier precio”, informa Efe.

 La asociación Ecologistas en Acción ha coincido en rechazar el proyecto. Además, ha descalificado el apoyo que le presta Aguirre, un hecho que considera “aberrante y un insulto a los ciudadanos”. “No debemos crear un Estado paralelo ilegal y gobernado por un mas que sospechoso magnate que solo busca su beneficio”, añade su nota.

Aguirre dice que solo el 18% sería juego

La presidenta de Madrid ha justificado los cambios legislativos que serían necesarios para lograr el EuroVegas en los "más de 200.000 empleos fijos" que crearía la "gran ciudad de ocio y los congresos", que resolverían "la mitad del paro" de la región. "Es algo que las autoridades tenemos la obligación de impulsar", ha afirmado Aguirre, para añadir que a estos empleos habría que añadir los derivados de la construcción de hoteles, teatros, infraestructuras...

En una visita a la depuradora de Valmayor, Aguirre ha insistido en que está dispuesta a negociar "las exigencias" que deseen hacer los inversores pero dentro siempre de "sus valores y principios". "Hay algunas exigencias a las que se puede acceder y otras a las que no, habrá que verlo", ha dicho, sin especificar cuáles sí y cuáles no, aunque ha subrayado que no ve "difícil" alcanzar un acuerdo que satisfaga a todas las partes implicadas teniendo en cuenta que se han podido llevar a cabo proyectos similares a este en otros lugares del mundo como Estados Unidos, Macao, Hong Kong o Shangai.

Según la presidenta , sólo el 18% del complejo estará dedicado al juego y el resto a otras actividades como compras, deporte o reuniones, algo similar, ha dicho, a lo que ocurre en Las Vegas donde "entre semana la utilización es todo para congresos y negocio y el ocio comienza el fin de semana".

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