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MOVILIZACIONES CONTRA LOS RECORTES

Los médicos prevén la pérdida de 1.500 puestos por los recortes de Aguirre

El colegio y el sindicato alertan de que las medidas traerán “masificación de la asistencia sanitaria”

Elena G. Sevillano
Miguel García-Alarilla y Julián Ezquerra, en la rueda de prensa.
Miguel García-Alarilla y Julián Ezquerra, en la rueda de prensa.CARLOS ROSILLO

Los médicos madrileños calculan que los recortes que ha puesto en marcha la Comunidad de Madrid en el sector público tendrán como consecuencia la pérdida de 1.500 puestos de trabajo entre los facultativos. No se trata de despidos, precisan, sino de contratos cubiertos por eventuales que desaparecerán cuando se aplique la ampliación de la jornada semanal de 35 a 37,5 horas, ha explicado esta mañana Julián Ezquerra, secretario general del sindicato médico mayoritario, Amyts.

Su organización y el Colegio Oficial de Médicos de Madrid han dado una rueda de prensa conjunta en la que han alertado de que la aplicación de las medidas de ajuste del Gobierno de Esperanza Aguirre tendrán como consecuencia “la masificación de la asistencia sanitaria y la consiguiente merma de la calidad asistencial”.

“Entendemos que estamos en una situación difícil, pero lo último que hay que recortar es el personal sanitario, el que hace actividad asistencial”, ha asegurado Ezquerra. Su organización, junto con el Colegio, al que ha representado el vicepresidente, Miguel García-Alarilla, han suscrito un comunicado conjunto que denuncia seis cuestiones que pueden acabar por colapsar el sistema sanitario. Entre ellas destacan la ampliación de jornada. “Esta medida no ha tenido en cuenta que el personal facultativo desarrolla, desde hace años, jornadas superiores a las 48 semanales, entre 50 y 60 en el caso de los residentes”, asegura el manifiesto.

“La situación de enfermedad de un médico en ningún caso puede considerarse absentismo”, añade el documento. Una enmienda a la Ley de Acompañamiento de los presupuestos establece que la Comunidad de Madrid deja de pagar los complementos de sueldo a los empleados públicos que estén de baja por enfermedad (incapacidad temporal; se excluye la baja de maternidad y los accidentes laborales). “La aplicación generalizada del castigo, en lugar de perseguir a quien realmente sea defraudador, con lo que estamos de acuerdo, representa un agravio”, aseguran los médicos, que alertan de que un facultativo que vaya a trabajar con gripe “puede representar un riesgo para sus pacientes”.

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Hasta ahora, la Comunidad complementaba las retribuciones de la Seguridad Social hasta completar el 100% del sueldo, tal y como hacen también la mayoría de empresas públicas. Cómo afectará esta medida a los trabajadores de la sanidad, que son más de 60.000, aún no está claro, ha afirmado Ezquerra, ya que la Comunidad de Madrid ha estado ofreciendo diferentes interpretaciones.

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La Consejería de Sanidad convocó ayer la mesa sectorial en la que negociará con los sindicatos de la sanidad la aplicación de las medidas de la Ley de Acompañamiento. Se reunirá con ellos mañana. Sin embargo, los médicos han querido dejar claro esta mañana que quieren pedir una negociación exclusiva de los facultativos con Sanidad. Se desvinculan, por tanto, de la marea blanca, el movimiento de los trabajadores sanitarios en contra de los recortes. “Los médicos debemos tener un órgano especial. Existe una diferencia clarísima entre los médicos y todos los demás trabajadores”, ha asegurado Ezquerra.

El colegio y el sindicato han pedido “transparencia” a la Consejería de Sanidad. “Queremos saber qué presupuesto hay para la sanidad, a qué se destina cada partida”, ha afirmado Ezquerra. “Y queremos que consensúen con nosotros las medidas que quieren aplicar”. “Desde el amargo reconocimiento de que serán necesarios aplicar, también en la sanidad, algunos recortes, ofrecemos nuestra colaboración desinteresada” a la Consejería, señala el documento conjunto. Los facultativos están a la espera de la reunión de mañana, pero no descartan tener que tomar “medidas drásticas” si los recortes se aplican “de manera indiscriminada”.

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Sobre la firma

Elena G. Sevillano
Es corresponsal de EL PAÍS en Alemania. Antes se ocupó de la información judicial y económica y formó parte del equipo de Investigación. Como especialista en sanidad, siguió la crisis del coronavirus y coescribió el libro Estado de Alarma (Península, 2020). Es licenciada en Traducción y en Periodismo por la UPF y máster de Periodismo UAM/El País.

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