_
_
_
_
_

Gallardón mantendrá las 35 horas de sus funcionarios y todo el sueldo en las bajas

El Consistorio ultima un acuerdo con los sindicatos municipales que prevé cerrar esta noche El alcalde, que hoy puede dejar el cargo, asegura las condiciones de 27.000 empleados hasta 2015

Es como el último gesto de Alberto Ruiz Gallardón hacia sus trabajadores. El mismo día que, previsiblemente, será llamado a formar parte del Gobierno de Mariano Rajoy, el hasta ahora alcalde de Madrid ultima un acuerdo con los sindicatos que afecta a los 27.000 empleados municipales en tiempos de crisis. Frente a la actuación de su enemiga política, Esperanza Aguirre, que ha incluido varias enmiendas a última hora en la Ley de Acompañamiento del Presupuesto para recortar derechos laborales sin negociación y de forma sorpresiva, el alcalde quiere cerrar un consenso esta tarde noche con la plantilla municipal.

El Gobierno regional ha ampliado la jornada de 35 a 37,5 horas para todo su personal (con un aumento de 12 millones de horas que equivale a casi 8.000 puestos de trabajo en jornada completa) y recorta un 40% el sueldo de los trabajadores entre los días 4 y 20 de una baja por enfermedad (excluye accidente laboral y maternidad). Según el grupo parlamentario popular, el principal objetivo es controlar el absentismo. La Comunidad de Madrid ha dado este paso sin acordar nada con los sindicatos, que conocieron la medida el lunes al tiempo que se registraban las enmiendas. En el caso municipal, el acuerdo sobre condiciones de trabajo mantiene las 35 horas semanales de los funcionarios y empleados públicos del Ayuntamiento y también el 100% de su sueldo mientras estén de baja, según han explicado fuentes sindicales. El Consistorio vigila desde hace dos años el absentismo de su plantilla mediante un acuerdo con las mutuas.

El acuerdo, que el Ayuntamiento espera ratificar esta tarde con los cuatro sindicatos presentes en la mesa general (CC OO, UGT, CSIF y CGT) tendría vigencia entre 2012 y 2015. No incluye mejoras económicas pero sí el compromiso de negociar las situaciones que puedan poner en peligro el empleo o estudiar mejoras en los sueldos y en las promociones si la situación económica cambia.

Las centrales están celebrando ahora asambleas para explicar el acuerdo a sus trabajadores. En síntesis, según las fuentes consultadas, es una prórroga de las condiciones actuales, garantizando derechos y condiciones consolidadas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_