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Rajoy zanja el debate sobre la nueva financiación: “Ahora es imposible”

El presidente enfría las aspiraciones de las autonomías que piden una reforma

Rajoy y Felipe VI, en el Palacio de Marivent.Foto: reuters_live | Vídeo: J. R. (AFP) | EL PAÍS- LIVE!

Mariano Rajoy quiso zanjar este viernes el debate sobre la urgencia de una reforma del sistema de financiación autonómica. El presidente del Gobierno lo expresó con claridad tras reunirse en el palacio de Marivent, en Palma de Mallorca, con Felipe VI en su despacho habitual de verano. “Es imposible hacer ahora un cambio de modelo”, afirmó.

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Las palabras del jefe del Ejecutivo enfrían una de las peticiones del presidente de la Generalitat, Artur Mas, que el pasado 30 de julio acudió a la cita con Rajoy en La Moncloa con un documento con 23 demandas relacionadas con una mejora de la financiación y la exigencia de una reforma del sistema. Y también suponen una negativa a casi todas las comunidades, especialmente después de las insistentes reclamaciones de autonomías del PP como Madrid, Valencia y Baleares, que en los últimos meses han hecho de la revisión del modelo una bandera.

“Es muy difícil en el presente momento aprobar” otro reparto entre las arcas del Estado y las cajas autonómicas. “Ahora no tiene mucho sentido. Todo el mundo lo entiende así y la razón se entiende muy bien”, manifestó el líder del PP en referencia al análisis de Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, y de los asesores expertos en la materia.

El argumento esgrimido por el Gobierno vincula esta decisión a las consecuencias de la crisis. Es decir, el vacío en las arcas públicas acumulado en los últimos años impide al Gobierno, al menos de momento, abrir otra vez el grifo del reparto tras una pérdida de recaudación de 70.000 millones de euros en solo dos ejercicios, 2008 y 2009, según defendió este viernes el presidente.

El plan del Ejecutivo consiste ahora en esperar que se afiance la recuperación económica y con ella una mayor recaudación para poder aportar más recursos a solventar “aquello que le importa a los españoles”. En palabras de Rajoy: educación, sanidad y dependencia. “Este es el objetivo, el reto, y de él no debemos separarnos”, remachó.

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El jefe del Gobierno dejó claro que “no le gusta” el actual modelo

En cualquier caso, el jefe del Gobierno dejó claro que “no le gusta” el actual modelo. No es el adecuado, concedió, “tiene sus dificultades y cosas que no están bien”. Recordó que cuando fue aprobado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en 2009, el PP lo rechazó. “Yo voté en contra, otros no lo tienen en cuenta”, enfatizó. Pero el Ejecutivo considera que aún no ha llegado el momento para emprender ese camino.

El propio Montoro lleva casi un año enfriando el diálogo multilateral. “Ahora no toca”, aseguró por primera vez en otoño de 2013. Después, situó esa revisión tras la aprobación de la reforma fiscal. Y ahora, una semana después de dar luz verde al nuevo modelo tributario, Rajoy zanjó de forma tajante ese debate.

Pero también hay razones políticas. Las adelantó Montoro en junio. El Ejecutivo quiere evitar nuevas turbulencias en el diálogo entre Administraciones. “No vamos a promover una discusión del sistema de financiación que promueva más agravios y enfrentamiento entre las autonomías y entre las comunidades y con el Gobierno de España. Es el momento de la reforma fiscal y de la bajada de impuestos. Esa es la prioridad”, aseguró entonces al atribuir esa decisión a un “clima político regular”. En definitiva, el Ejecutivo trata de evitar nuevos enfrentamientos cuando falta menos de un año para las próximas elecciones autonómicas y municipales. A pesar de ello, la mayoría de los presidentes regionales siguen solicitando más recursos. Y algunos de ellos temen perder la mayoría absoluta.

Baleares y la Comunidad de Madrid son las que más aportan al Estado y menos reciben

Rajoy, por ejemplo, habló en una comunidad gobernada por el PP que, al igual que Ignacio González en Madrid o Alberto Fabra en Valencia, se dice perjudicada por el actual sistema. Baleares y la Comunidad de Madrid son las que más aportan al Estado y menos reciben, según el cálculo de las balanzas fiscales.

Artur Mas, por su parte, destaca en el documento con las propuestas para mejorar la financiación de Cataluña entregado la semana pasada a Rajoy que “cabe recordar que el Govern de la Generalitat ha presentado un requerimiento emplazando al Gobierno central a revisar el sistema de financiación”.

A pesar de eso, Rajoy recordó el viernes que existen otros mecanismos para ayudar a las comunidades con dificultades financieras. Señaló, por ejemplo, que en el último Consejo de Política Fiscal y Financiera Montoro, el órgano de interlocución entre las autonomías y el Gobierno, fue aprobada una quita del interés de devolución del crédito obtenido a través el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Esa medida dará, según Hacienda, más de 4.000 millones de alivio a los Gobiernos regionales en 2015.

Pero eso no contenta a los que no solicitaron esos créditos, como ocurre con la Comunidad de Madrid. Una objeción extendida consiste en que el dinero ahorrado equivale al esfuerzo adicional que deberán hacer para ajustarse al objetivo de déficit, fijado en el 1% para 2014.

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