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“Siempre ha habido toros que han matado a personas”

La Generalitat valenciana deja en manos de los ganaderos retirar a los morlacos asesinos

El toro 'Ratón', en las fiestas de Albal, Valencia, en 2006.
El toro 'Ratón', en las fiestas de Albal, Valencia, en 2006. EL PAÍS

No existen normas que sirvan para retirar del circuito de fiestas taurinas populares a los animales que muestren una elevada peligrosidad o tengan un historial de reincidencia en cogidas peligrosas o mortales. Por ello, no habría resquicio legal para sacar a Ratón de la circulación, el toro que ha disparado su caché tras matar a un joven en Xàtiva el viernes pasado y que ya había causado la muerte a otro en 2006 en el Puerto de Sagunto.

El consejero de Gobernación, Serafín Castellano, explicó ayer tras presidir la comisión de Bous al Carrer de la Comunidad Valenciana que se ha planteado esta cuestión en la reunión. “Es un tema debatido ya en otras ocasiones”, comentó el consejero. Castellano indicó que ha solicitado un informe a los ganaderos para que determinen si es posible establecer una serie de “criterios objetivos” a partir de los cuales se pueda decidir si una res es especialmente peligrosa y, como consecuencia de ello, se pueda rechazar su participación en festejos populares.

El consejero de Gobernación dice que la legislación valenciana sobre festejos taurinos
es la "más dura"

“Tienen que ser los expertos los que se pronuncien sobre esta posibilidad, por eso hemos pedido a los ganaderos que nos digan si es posible determinar esta cuestión con arreglo a condiciones objetivas”, aclaró.

En todo caso, el consejero comentó que es “responsabilidad” de los ganaderos retirar a los toros si ven que no está en condiciones de salir “o incluso de quien contrata” el espectáculo taurino.

Castellano, que compareció junto al presidente de la Federación de Peñas de Bous al Carrer, Manuel Vicente y al presidente de la Asociación de Bous al Carrer, Juan Carlos Aparicio, trasladó las condolencias de la Generalitat a los familiares del fallecido en Xàtiva e insistió en repetidas ocasiones en que la legislación valenciana sobre festejos taurinos es “la mas dura y exigente” de España. Pese a ello, la seguridad “total” es “una utopía”. “No estamos hablando de ir a tomar el sol a la playa, sino de un espectáculo de alto riesgo para el que hay que ir preparado”, comentó el consejero. “Siempre ha habido toros que han matado a personas. Si una persona ebria se pone delante de un toro, lo normal es que el desenlace sea grave”, indicó Castellano.

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El número de heridos en estos espectáculos ha descendido un 21%
en dos años

Entre 2008 y 2010, el número de heridos en estos espectáculos ha descendido un 21% en la Comunidad Valenciana, donde se celebran más de 6.000 festejos al año.

Serafín Castallano destacó tras la reunión de la Comisión de Bous al Carrer las dificultades que existen para que personas en estado de embriaguez o bajo los efectos de sustancias estupefacientes participen en este tipo de actos.

Por ello, la Generalitat ha encargado un informe jurídico para equiparar estos festejos con los encuentros deportivos de alto riesgo, con el fin de que la policía pueda retener y prohibir a participantes que se encuentren con sus facultades físicas mermadas se pongan delante de un toro.

El consejero de Gobernación recordó que la normativa que regula los bous al carrer ya impide la participación de personas que no se encuentren en condiciones “físicas o psíquicas” para hacerlo. Sin embargo, la policía o los voluntarios acreditados para mantener el orden solo tienen la facultad de sacarlas del recinto.

En el caso del accidente de Xàtiva, el festejo tuvo lugar en una plaza de toros, sin embargo, lo más normal es que el lugar en el que se sueltan las reses sea un espacio abierto al que se puede acceder por distintas calles, lo que facilita a la persona expulsada la posibilidad de volver a acceder sin demasiado esfuerzo las veces que desee. La policía solo puede detener a estos participantes cuando ignoran de forma repetida las advertencias de que abandone el área de festejos. Únicamente entonces, bajo la acusación de desobediencia a la autoridad, se puede detener a esta persona, explicó el consejero.

El informe jurídico encargado por el Gobierno valenciano pretende determinar si es posible aplicar a los festejos taurinos algunas disposiciones de la Ley contra la Violencia en el Deporte, que permite a las fuerzas de seguridad impedir el acceso a los recintos donde se disputan encuentros considerados de alto riesgo a personas con síntomas de haber abusado del alcohol u otro tipo de drogas.

Al igual que sucede en estos casos, la medida permitiría a los agentes hacer controles de alcoholemia y de sustancias estupefacientes y dejar a las puertas de los recintos a quienes dieran resultados positivos. Si el informe determina que esta medida es jurídicamente viable, la Generalitat solicitará “las modificaciones legales pertinentes” al Gobierno central para aplicarla.

En marzo pasado ya se anunciaron medidas similares relacionadas con la posibilidad de implantar test de alcoholemia, después de que la comisión de festejos taurinos modificara el reglamento de bous al carrer. Sin embargo, aún no se han hecho efectivas, como tampoco la posibilidad de imponer una sanción grave (hasta 30.000 euros) a quien participe estando borracho.

El consejero recordó que cada año se celebran en las comarcas valencianas unos 6.000 festejos taurinos tradicionales lo que demuestra “la enorme tradición que existe en nuestra tierra”. Hasta el mes de julio “y pese a la crisis”, los festejos de bous al carrer se han incrementado en un 26,6% respecto al mismo periodo del año anterior. El año pasado la Generalitat autorizó 5.815 actos de este tipo, según indicó el responsable de Gobernación.

Castellano también indicó que se ha abierto una investigación para esclarecer el fallecimiento del joven de Xàtiva, que según algunos testimonios presentaba síntomas de embriaguez y, como ha indicado su madre, era una persona con una enfermedad mental (esquizofrenia), por lo que estaba evaluado con un 65% de discapacidad psíquica. La Generalitat “depurará cualquier tipo de responsabilidad a través de una aplicación clara y contundente de la normativa para que la fiesta no se vea empañada por actuaciones aisladas”, indicó el consejero.

En ninguna comunidad autónoma “hay una normativa tan exigente como la valenciana”. El presidente de la Federación de Bous al Carrer de la Comunidad Valencana, Manuel Vicente, insistió en las palabras pronunciadas por Castellano y sostuvo que los festejos “no han estado nunca más regulados que ahora”. Juan Carlos Aparicio, de la Asociación de Bous al Carrer, añadió que “el porcentaje de heridos y muertos es bajo”, teniendo en cuenta que al año hay 6.000 festejos, en los que participan una media de 1.000 personas.

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