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El PSOE expulsará a los ediles que apoyaron al PP en cuatro alcaldías

La regidora de Chipiona dimite a los dos días de su sorprendente elección

EFE

Romper la disciplina de voto puede costarle caro a 12 concejales del PSOE que el pasado sábado permitieron que el Partido Popular sumara cuatro alcaldías más en Andalucía. Estas son las de Carmona (Sevilla), Almuñécar (Granada), Cardeña (Córdoba) y Partaloa (Almería). La secretaria de Organización del PSOE andaluz, Susana Díaz, anunció ayer la apertura de expediente disciplinario a esta docena de ediles que con su voto o su abstención propiciaron la elección de alcaldes del PP, incumpliendo los pactos previos alcanzados con Izquierda Unida en el caso de Carmona y Cardeña, y de los andalucistas, en Almuñécar y Partaloa. Estos expedientes disciplinarios pueden terminar en expulsiones.

Díaz interpretó que cuando los ciudadanos votaron al PSOE estaban emitiendo un voto para la izquierda y no para la derecha, con lo que los votos del PSOE tenían que ir dirigidos a conformar gobiernos estables, de progreso y de izquierdas "y no a cualquier precio".La número dos del PSOE lamentó que IU, con sus pactos con el PP, haya impedido que los socialistas gobernaran en 43 ayuntamientos andaluces. En su opinión, la palabra del coordinador federal de IU, Cayo Lara, y la del coordinador andaluz, Diego Valderas, ha "perdido valor", por cuanto garantizaron que su formación, ni por acción ni por omisión, permitiría gobiernos de la derecha en Ayuntamientos andaluces. Díaz acusó a IU de "traicionar y malversar" la voluntad de los ciudadanos de izquierda. También aprovechó para recordar la "factura" que la federación de izquierdas pagó en las elecciones autonómicas de 1996 tras la llamada legislatura de la pinza, en la que populares e IU mantuvieron una acción política conjunta.

Socialistas e IU han llegado a acuerdos en 99 Ayuntamientos de la comunidad, donde a partir del sábado pasado el PSOE gobierna en 373, el PP en 271 e Izquierda Unida en 74.

Por su parte, Diego Valderas restó importancia al hecho de que los concejales de IU no hayan apoyado a los socialistas en todos los ayuntamientos y lo calificó como "tristes anécdotas". Según sus datos, en 27 ayuntamientos se ha incumplido con la disciplina marcada y en algunos casos la decisión de no apoyar a los candidatos socialistas está "más que justificada".

"Ha habido lugares en los que actitudes de nepotismo, prepotencia, soberbia y un excesivo desprecio del PSOE a IU han imposibilitado cualquier tipo de apoyo", comentó Valderas.

Dos de los Ayuntamientos donde IU ha permitido que gobierne el PP, pese a que el PSOE fue la lista más votada, han sido Almonte (Huelva) y Alcalá de los Gazules (Cádiz), donde los socialistas llevaban gobernando desde las primeras elecciones municipales en 1979. En estas dos localidades, IU abrirá también expedientes informativos, el paso previo a la expulsión, a sus ediles que han permitido el acceso al PP a las alcaldías. También se iniciará el mismo procedimiento en las localidades de Gergal (Almería), Palenzuela y Encinas Reales (Córdoba), Vélez de Benaudalla (Granada), Herrera y Mairena del Alcor (Sevilla). Los concejales expedientados serán 14.

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Según afirmó Valderas, en estas localidades IU promoverá mociones de censura en los próximos 12 meses para "rectificar" una situación política imprevista. Valderas se mostró relativamente satisfecho del nivel de cumplimiento de los pactos de IU con el PSOE, muy similar al de hace cuatro años. También reclamó "mesura" al PSOE en sus críticas por lo que pueda ocurrir después de las elecciones autonómicas, en alusión a un pacto regional PSOE e IU. "O se ara bien la tierra o la tierra no germina", aseguró Valderas.

Y cuando apenas los alcaldes han tenido tiempo para ocupar sus despachos ayer se produjo la primera dimisión. Se trata de la alcaldesa de Chipiona, Isabel María Fernández (IU). La munícipe renuncia dos días después de haber sido investida con los votos inesperados de los siete concejales socialistas que evitaron así la llegada a la alcaldía del candidato del PP y vencedor de las elecciones, Antonio Peña, informa Ana Huguet. Fernández, que obtuvo dos concejales, dio el paso sin ni siquiera esperar la celebración de una reunión de la dirección regional de su partido en la que se iba a decidir entre dos opciones: renunciar a la alcaldía regalada por el PSOE o tratar de cerrar un acuerdo con los socialistas para garantizar un gobierno de izquierdas.

Con la dimisión encima de la mesa, hay un plazo máximo de 10 días para convocar un pleno extraordinario en el que se vuelva a someter a votación la investidura del alcalde de Chipiona. Si no hay más sobresaltos, el candidato del PP, que consiguió ocho ediles en las urnas, gobernará en minoría.

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