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La Masia aún la toca

Aunque el Barça sufre a balón parado, el equipo firma ante el Chelsea cuatro minutos y medio espectaculares de posesión y gol compuestos por 10 canteranos

Jordi Quixano
Iniesta, con el balón, ante Zouma.
Iniesta, con el balón, ante Zouma.NICHOLAS KAMM (AFP)

Equipo que de inicio se definió por su fiabilidad defensiva, puesto que no encajó gol alguno en los ocho primeros partidos de la pasada Liga, el Barça parece ahora más enclenque en esta faceta. En los tres partidos de pretemporada ha encajado seis goles (dos por duelo; mientras que en la Liga su media fue de 0,55). Pero la sangría, sobre todo, llega a balón parado: los LA Galaxy resolvieron un córner con un cabezazo; Rooney imitó la suerte del remate con el Manchester United; y Cahill, del Chelsea, culminó el error de Masip y el saque de falta lateral y retrasado.

“Es algo que parecía que habíamos resuelto el año pasado y hay que seguir trabajando. Está claro que no tenemos jugadores altos, lo que dificulta defender este tipo de jugadas. Pero tener a estos futbolistas, por el contrario, ayuda a lograr una mejor circulación del balón”, expuso Luis Enrique. No le falta razón, como bien demostraron 10 canteranos.

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Cuando se cumplió la hora de partido ante el Chelsea, Diego Costa salió del campo cojeando y con una presumible lesión muscular. Desde el otro banquillo, sin embargo, y de una tacada, entraron Masip, Piqué, Rafinha, Samper, Iniesta y Pedro. Los canteranos se unieron a Sergi Roberto, Jordi Alba, Munir y Sandro, por lo que el único sin ADN azulgrana sobre el tapete era Vermaelen.

La alineación recordó a la del 25 de noviembre de 2012, cuando el Barcelona presentó ante el Levante un equipo formado exclusivamente por canteranos. Y fue en el minuto 61:50 cuando entre todos se pusieron a repartirse el esférico, con posesiones largas, pases infinitos, circulación veloz y precisa de lado a lado y hasta vertical para descontar líneas y validar posiciones de disparo. Así, en cuatro minutos y medio exactos, ejecutaron una sesión de 36 pases que se acabó con un chut de Munir desviado por un rival a córner. Después, rechazado el esférico por Ivanovic —única ocasión en la que el Chelsea tocó el esférico en ese espacio de tiempo—, el Barcelona comenzó de nuevo a jugarla con triangulaciones, rondos marca de la casa, y fútbol de La Masia. Otros 21 pases que finalizaron en las botas de Sandro, que se marcó un recorte estupendo e inventó un zambombazo cruzado que acabó en gol.

La excelsa conjugación del esférico, en cualquier caso, no bastó para doblegar al Chelsea, que ganó desde la ruleta de los penaltis tras el 2-2 final. Era un equipo más rodado, como también el Manchester United, porque la Premier comienza el 8 de agosto. “Lo que menos me preocupa es el resultado. Estoy muy satisfecho por el partido”, señaló Luis Enrique antes de coger el avión de regreso a Barcelona. Quizá porque, entre otras cosas, el duelo sí que valió para reivindicar a La Masia, que el último curso se dio de bruces: con la realidad porque el filial descendió a Segunda B y en casi todas las otras categorías se quedó sin cantar el alirón. Ahora, sin poder contar con los refuerzos hasta enero (Aleix Vidal y Arda Turan), las apariciones de los canteranos podrían ser capitales para que el Barça no ceda puntos en la primera vuelta liguera, en la que visita todos los campos grandes de Primera.

Sergi Roberto, un lateral apañado

Sin Aleix Vidal hasta que se levante la sanción de la FIFA, el Barcelona contaba con Douglas y Alves para ocupar el lateral derecho, también ocasionalmente con Adriano. “Ahora tengo cada vez mejor la cabeza, más confianza y mentalidad para hacer bien las cosas”, reflexionó Douglas la semana pasada, después de contar al fin para Luis Enrique como una opción en la retaguardia.

Pero ante el Chelsea se rompió el bíceps femoral de su pierna derecha, por lo que estará ocho semanas de baja. Nada nuevo; desde que llegara el año pasado al Barça, el brasileño ha padecido una elongación en el tobillo izquierdo, un virus estomacal, una fisura en el dedo de un pie y una rotura en el recto anterior de la pierna izquierda. “Con mucho, es la peor noticia de la pretemporada”, se lamentó Luis Enrique.

Aunque en los dos últimos partidos, Sergi Roberto se ha encargado del lateral y no ha desentonado, impulsivo en las subidas y sin complicaciones en la salida del balón. “Tiene un potencial impresionante, es resistente, tiene visión de juego y el perfil para jugar en varias posiciones, por lo que es un recurso que seguro utilizamos esta temporada”, dijo Luis Enrique. Quizá es la ocasión de Sergi Roberto –hasta la fecha apenas había jugado desde la temporada 2010-11-, que cuenta con 225 minutos en la pretemporada, más que ningún otro.

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