_
_
_
_
_

El Constitucional cierra la puerta al recurso de la madre de Asunta

Rosario Porto deberá decidir ahora si llega a Estrasburgo con el caso por el que cumple junto a su exmarido una condena de 18 años como culpable de asesinato

Rosario Porto, con su exesposo en segundo plano, durante el juicio en 2016.
Rosario Porto, con su exesposo en segundo plano, durante el juicio en 2016.Óscar Corral

El Tribunal Constitucional ha cerrado la última puerta que le quedaba en España a Rosario Porto, la madre de la niña Asunta Basterra, hallada muerta en una pista forestal a las afueras de Santiago en septiembre de 2013, cuando tenía 12 años. Porto cumple una condena de 18 años por asesinato con la agravante de parentesco, actualmente en la cárcel pontevedresa de A Lama, después de sobrevivir a tres intentos de suicidio en la prisión coruñesa de Teixeiro. Su abogado, José Luis Gutiérrez Aranguren, había presentado un recurso de amparo con la esperanza de que los magistrados consideraran la debilidad de algunos indicios, los cabos sueltos y las preguntas que quedaron sin respuesta tras la instrucción, el juicio y las sucesivas sentencias condenatorias de la Audiencia de A Coruña, el Tribunal Superior de Galicia y el Supremo. Pero la respuesta de la Sección Segunda de la Sala Primera del Constitucional, con fecha del pasado día 12, no le da más vueltas al Caso Asunta: "La sección ha examinado el recurso presentado y ha acordado no admitirlo a trámite por no apreciar en el mismo la especial trascendencia constitucional que, como condición para su admisión", se "requiere".

La defensa de Rosario Porto, que niega la autoría del crimen desde el día de su detención en el tanatorio en el que velaba el cadáver de su hija, planteará ahora a la reclusa la posibilidad de llevar el caso al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo y ella deberá tomar la última decisión. Mientras tanto, Porto y su abogado siguen aguardando una respuesta de Instituciones Penitenciarias acerca de las causas por las que fue trasladada a A Lama.

El anuncio de ese traslado desde la prisión en la que llevaba ingresada desde pocos días después de la muerte de Asunta fue el que precipitó la ingesta masiva de medicamentos con la que Porto intentó quitarse la vida en febrero. Intoxicada por el consumo de unas 50 pastillas, fue hallada inconsciente en su celda y permaneció hospitalizada en A Coruña durante dos semanas. La Secretaría General de Instituciones Penitenciarias atribuyó el episodio a una "mala reacción" al tratamiento y nunca se llegó a aclarar públicamente qué tipo de precauciones se toman para evitar el acopio de fármacos que puedan poner en peligro la vida de los internos.

El exmarido de Porto, Alfonso Basterra, que cumple el mismo tiempo de condena por estos hechos, también recurrió al Constitucional a través de una abogada de oficio. No ha trascendido, de momento, la respuesta que ha recibido del tribunal.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_