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Cataluña usa un 10% más del agua que tiene disponible

La Generalitat planea reducir esta brecha en 2021 a través de nuevas infraestructuras

Camilo S. Baquero
El río Ter en su paso por Colomers (Baix Empordà).
El río Ter en su paso por Colomers (Baix Empordà).Alejandra Marly

¿Tiene Cataluña garantizado el suministro de agua? Se trata de una pregunta que, tristemente, solo aparece en el debate público en el Día Mundial del Agua. Este miércoles, los organizadores del Foro de la Economía del Agua, que se celebrará en abril en Barcelona, alabaron los esfuerzos de la Generalitat para garantizar la seguridad hídrica, pero recordaron que, en un promedio anual, la demanda prevista en Cataluña supera en un 10% los recursos disponibles. Desde la Agencia Catalana del Agua (ACA) defienden que en los últimos años se ha aumentado un 30% la disponibilidad en el Área Metropolitana mediante salinizadoras.

“Los recursos disponibles en las cuencas internas de Cataluña son de 2.613 hectómetros cúbicos, mientras que la demanda es de 2.965”, aseguró el director académico del Foro de la Economía del Agua, Gonzalo Delacámara. La ACA, en su plan de cuencas de 2021, calcula dicha brecha, que planea compensar a través de nuevas desaladoras y la reutilización de agua.

Desde el organismo autonómico señalan que el déficit sería de dos metros cúbicos por segundo, pero solo en el caso de una sequía prolongada y que acabara con las reservas de los embalses. En una situación extrema, el consumo humano está garantizado por ley y se limitan otros usos. De hecho, en años secos, se riega menos en los cultivos, lo que compensa el déficit.

La ACA defiende que solo en el Área Metropolitana se ha aumentado la capacidad en 122 hectómetros cúbicos anuales gracias a la puesta en marcha de la desaladora del Llobregat y la ampliación de la de Tordera. “Sí sería necesaria alguna nueva infraestructura para incrementar garantía”, agregan. Una opción es aportar agua tratada al tramo final del Llobregat para tener más agua que potabilizar.

La gran presencia de turistas —que utilizan cuatro veces más agua que un local— también añade más presión sobre los recursos hídricos. Delacámara, que no ve una amenaza de desabastecimiento, destacó la reducción de un 30% en el consumo gracias a las campañas educativas, pero recordó que Cataluña es una de las comunidades que más agua embotellada consume. El economista pide trabajar más en la reutilización de agua.

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Sobre la firma

Camilo S. Baquero
Reportero de la sección de Nacional, con la política catalana en el punto de mira. Antes de aterrizar en Barcelona había trabajado en diario El Tiempo (Bogotá). Estudió Comunicación Social - Periodismo en la Universidad de Antioquia y es exalumno de la Escuela UAM-EL PAÍS.

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