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La participación en la consulta de Podem no llega al 10%

Solo 3.901 participantes de la formación morada de los 52.000 inscritos han votado

Àngels Piñol
Albano Dante Fachin.
Albano Dante Fachin.MASSIMILIANO MINOCRI

La participación en la consulta que Podem ha celebrado durante tres días —entre el jueves y el sábado— para decidir si se suma a la construcción del partido que impulsan con BComú, ICV y EUiA no ha llegado al 10%. Solo 3.901 participantes de la formación morada de los 52.000 inscritos han votado. Pese a a todo, el secretario general de Podem, Albano Dante Fachin, se mostró ayer satisfecho: “¿Cuántas organizaciones delante de una decisión tan importante como la que tenemos entre manos dan la voz a la militancia?”, se preguntó ayer en Catalunya Ràdio.

La participación alcanzó el 7,5% —en las primarias que auparon a Fachin votaron 6927 personas, lo que supuso un 13% del censo— pero fuentes de la dirección de Podem aseguran que en ningún documento del partido se exige un mínimo para validar una consulta. Miembros de la cúpula sostienen que en el esquema organizativo aprobado en Vistalegre 2 no figura ese requisito. Esos textos son los que prevalecen y anulan los de Vistalegre 1, donde sí se exigía un mínimo para las primarias. Si se utiliza el baremo de los afiliados que han participado en los últimos meses —30.000—, la participación es del 13%.

Fachin, que avanzó que cumplirá el mandato de las bases, mostró su satisfacción por el hecho de que hayan votado casi 4.000 personas, el mayor número de personas que hasta ahora han debatido los procesos de Un país en común, que aglutinó en su proceso participativo a 3.000 personas. Fuentes de los comunes afirman que el censo oficial se han registrado las mismas personas aunque no han facilitado el número oficial. Podem llamó a sus 52.000 inscritos a votar para dilucidar si se dan las condiciones para seguir apostando por el partido de izquierdas auspiciado por Colau. Fachin ha hecho campaña por el “no” al señalar tres factores que estima imprescindibles y que, a su juicio, ahora no se dan en el proyecto: que los inscritos en su partido voten directamente y de forma telemática la nueva fuerza; que la ejecutiva se elija con listas abiertas y con un sistema proporcional y que se vote ya un código ético cerrado. La gran duda es si Pablo Iglesias, que estuvo ayer en Badalona y ha guardado silencio, acabará mediando en el conflicto si se impone el “no”.

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