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El Joan XXIII cobra a unos padres la visita a urgencias de su bebé

La Ley dice que las urgencias de niños son gratuitas sea cual sea su situación administrativa

Jessica Mouzo
Protesta ante el Ministerio de Sanidad en Madrid en 2015
Protesta ante el Ministerio de Sanidad en Madrid en 2015Claudio Álvarez

Buena parte del dinero que Jelitza tenía guardado para pagar el alquiler, acabó en el hospital Joan XXIII de Tarragona. En concreto, 150 euros, lo que el centro sanitario le facturó para que atendiesen a su sobrino, de un año, en las urgencias del hospital. Su hermana, su cuñado y sus dos sobrinos acababan de mudarse a Tarragona desde Venezuela y todavía no habían solicitado la tarjeta sanitaria cuando uno de los pequeños se puso enfermo. Pese a que la normativa establece que las urgencias a menores son siempre gratuitas, sea cuál sea su situación administrativa, el Joan XXIII cobró por anticipado a la familia la visita a urgencias.

Después de que el Gobierno de Rajoy fulminase en 2012 la asistencia sanitaria universal a inmigrantes en situación irregular, el Departamento de Salud sacó varias instrucciones flexibilizando los criterios de acceso. De hecho, el actual consejero de Salud, Toni Comín, desplegó una instrucción para garantizar la asistencia urgente a todos los habitantes y prepara una ley para universalizar la sanidad. Sin embargo, y tal y como avanzó la Cadena Ser, las entidades alertan de que se siguen dando casos de exclusión sanitaria porque el personal de admisión de los centros no conoce la legislación. “Salud no se ocupa de que se cumpla la norma. No se aplica porque los trabajadores no la conocen”, advierte un portavoz de la Plataforma por una Atención Sanitaria Universal en Cataluña (Pasucat). Desde que Comín puso en marcha la última instrucción en septiembre, la entidad ha detectado 10 casos similares al del sobrino de Jelitza.

La Pasucat alerta de que, además, querer cobrar antes de atender al paciente genera un efecto disuasorio. “Mi cuñado también estaba enfermo y mi otra sobrina, de tres años, también estaba resfriada, pero al ver que nos cobraban, optamos por pagar la atención del bebé, que era el que peor estaba y tenía dificultades para respirar”, lamenta Jelitza.

El hospital, por su parte, reconoce el error y asegura que devolverá el dinero. Salud se reunirá con las entidades para estudiar los casos que denuncian.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.

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