Dos años de prisión para el exalcalde de Humanes por malversación
Adolfo Álvarez Sojo también es considerado culpable de un delito de prevaricación
El exalcalde y presidente del Ayuntamiento de Humanes (19.413 habitantes) en la legislatura 2007-2011, Adolfo Álvarez Sojo (CSH), ha sido condenado a dos años de cárcel por malversación de caudales públicos. La Sección 23 de la Audiencia Provincial madrileña también le considera culpable de un delito de prevaricación y pide para él nueve años de inhabilitación especial para cargo o empleo público.
La sentencia establece que Álvarez Sojo, junto con la teniente de alcalde en la misma legislatura, Ana Fenoy (CSH), y el administrador único de la Autoescuela Humanes S.L, Félix F.L -ambos condenados-, acordaron la adjudicación de contratos de manera irregular. El contrato en cuestión -por un importe de 7.940 euros- se hizo a la Autoescuela Humanes, para que se impartieran cursos de seguridad en los colegios públicos de la localidad.
El responsable de la autoescuela nunca impartió el curso -ya que lo hizo la Policía Local de Humanes- pero sí lo facturó al Ayuntamiento. El importe -7.940 euros- suponía la cantidad exacta que Féliz F.L. debía al Ayuntamiento por tasas municipales que no abonó cuando fundó su negocio.
Fenoy, a sabiendas de que el curso de seguridad vial no lo impartió la autoescuela Humanes, dio por visto bueno el pago. El siguiente año -2011-, el exalcalde y el responsable de la autoescuela realizaron la misma estrategia. Félix F.L realizó la adjudicación del curso por un importe de 5.510,88 euros -el mismo que adeudaba el administrador en concepto de tasas municipales-. El curso no llegó a impartirse al coincidir con el fin de la legislatura y la llegada de un nuevo gobierno municipal.
Por estas razones, los magistrados condenan a Ana Fenoy Valenzuela a dos años de prisión al considerarla cooperadora necesaria de un delito de malversación, y la inhabilitan para empleo o cargo público durante seis años. A Félix F. L. le imponen un año y tres meses de prisión por malversación de caudales públicos y falsedad documental. Por el delito de prevaricación imponen al administrador cuatro años y medio de inhabilitación especial para empleo o cargo público.
Los magistrados absuelven a los acusados de un delito continuado de prevaricación y malversación de caudales en grado de tentativa. A su vez, también exculpan a Fenoy del delito de falsificación en documentos oficiales. La sentencia se podrá recurrir ante el Tribunal Supremo.