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El Parlament se opone al TTIP con la división de Junts pel Sí

El grupo mayoritario y la CUP reflejan sus diferencias en la política fiscal con vistas a los Presupuestos

El Gobierno y los diputados de Junts pel Sí, este jueves, en el Parlament.
El Gobierno y los diputados de Junts pel Sí, este jueves, en el Parlament.Andreu Dalmau (EFE)

El Parlament aprobó este jueves una resolución, durante el debate de Política General, contra la firma de tratados internacionales como el TTIP (Tratado Transatlántico de comercio e inversiones) que no garanticen la soberanía de las instituciones elegidas de forma democrática y que preserven los derechos de los ciudadanos por encima de los mercados. El documento, impulsado por todos los grupos de la cámara salvo Ciudadanos y el Partido Popular, fue aprobado por 68 votos a favor, 14 en contra y 53 abstenciones. La votación reflejó la división de Junts pel Sí que dio libertad de voto a sus diputados: la mayoría de los miembros del Partido Demócrata Europeo Català se abstuvo mientras los de Esquerra apostaron por el "sí". La fractura en este punto la encarnaron el presidente, Carles Puigdemont  y el vicepresidente Oriol Junqueras: el primero se abstuvo y el segundo votó a favor.

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La resolución, de hecho, solo fue rechazada por los 11 diputados del Partido Popular y tres de los diputados independientes que integran Junts pel Sí: los economistas Germà Bel y Oriol Amat y el que fue cabeza de lista en Lleida, Josep Maria Forner. Ningún consejero del Ejecutivo votó, por tanto, en contra del texto. Raül Romeva, de Asuntos Exteriores, se inclinó por el "sí" igual que, por ejemplo, Dolors Bassa, consejera de Trabajo, mientras la portavoz del Gobierno Neus Munté y Josep Rull, de Territorio se abstuvieron igual que Marta Pascal, coordinadora del partido heredero de Convergència. El PSC, Catalunya Sí que es Pot y la CUP apoyaron el texto y Ciudadanos optó por la abstención. El partido naranja logró aprobar una propuesta de resolución por unanimidad de toda la Cámara: que las autopistas sean gratis. Otra de las propuestas que gozó del respaldo de todos los grupos, incluido Junts pel Sí: que el Gobierno ejecute las medidas pendientes y que fueron aprobadas en el Pleno monográfico para combatir la pobreza.

Las votaciones del Debate de Política General anticiparon el pulso que mantendrán Junts pel Sí y la CUP en la negociación de la política fiscal. El grupo mayoritario sí que se alineó con los anticapitalistas para modificar la ley de estabilidad presupuestaria para dejar "sin efecto" los límites del déficit y el tener que pagar la deuda por encima de las políticas sociales (se aprobó con 99 votos a favor y 36 en contra). Pero eso no impidió que Junts pel Sí votara en contra del texto de la CUP sobre la soberanía fiscal y la redistribución de la riqueza y se visualizara la distancia que les separa.

El Gobierno deberá acusar en los casos de abusos a menores

El Parlament ha instado hoy una resolución conjunta del PSC y Sí que es Pot de protección a la infancia en la que se insta al Gobierno a ejercer la acusación particular en el caso de los niños que sufren abusos sexuales a menores, empezando por el de los Maristas. Todos los grupos de la oposición han votado a favor (73) de la propuesta salvo Junts pel Sí (62), que se ha quedado solo en este punto después ed que el PP cambiara el sentido de su voto. La consejera Dolors Bassa argumentó hace un mes que la Generalitat había decidido no ejercer la acusación particular en el caso de los Maristas porque las víctimas son ahora adultas y la mayoría de las 43 denuncias presentadas ya habrían prescrito.

La CUP planteó tres ejes: modificar el IRPF por el tramo alto para cumplir la máxima de que pague más quien más tiene; eliminar el mínimo exento de impuesto de patrimonio y regresar al impuesto de donaciones y sucesiones tal y como estaba antes de la modificación de Tripartito. Los anticapitalistas solo lograron la complicidad de Sí que es Pot. El texto no prosperó al contar solo con 36 votos a favor, 98 en contra y una abstención.

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La CUP no piensa ceder en el capítulo impositivo y sostiene que su reivindicación no es solo de sus bases sino que la reclaman la mayoría de ciudadanos catalanes, según las encuestas del Centro de Estudios de Opinión (CEO). Junts pel Sí solo quiere recuperar los tributos propios declarados inconstitucionales (sobre nucleares y depósitos bancarios) o los que están pendientes de sentencia (el de pisos vacíos) y avanzar en la fiscalidad verde formulando "impuestos como el de las grandes áreas comerciales.

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