Una concejal de la CUP denuncia que sufrió una agresión sexual

Maria Rovira, concejal de la CUP en el Ayuntamiento de Barcelona, ha hecho pública una agresión sexual que sufrió el 1 de septiembre a la una de la madrugada en una calle del barcelonés barrio de Gràcia. En el escrito, Rovira explica que un hombre la asaltó cuando andaba sola de noche y le empezó a tocar los genitales. Rovira relata que empezó a gritar y a pelearse con el hombre para deshacerse de él. Finalmente el agresor huyó. "Toda yo temblaba, y rápidamente fui consciente de que acababa de sufrir una agresión sexual", apunta. 

Cuando llegó a casa, Rovira llamó a los Mossos d'Esquadra, que a los pocos minutos llegaron a su domicilio. En el relato de los hechos, Rovira lamenta que lo primero que le dijeron es que "estas cosas pasan, son personas que no están bien de la cabeza" y que le recomendaron que denunciase por un intento de robo, porque tendría más repercusiones penales para el agresor. Unas frases que le repitieron el día siguiente, cuando puso la denuncia en comisaría.

La concejal critica la gestión de los Mossos d'Esquadra de su denuncia. "No es coherente pedir a las mujeres que denuncien, si la gestión que se hará de su denuncia es esta", lamenta. Rovira ha lamentado, en rueda de prensa en el Ayuntamiento, que "cuando denuncias por una agresión sexista lo primero que ves es un hombre". "Hoy ha tenido lugar el asesinato de una mujer en Esplugues, un hecho que es consecuencia de la violencia que yo denuncio en el texto", ha añadido, recordando que hay miles de agresiones sexistas cada año.

Así mismo, reprocha a las instituciones, también las municipales, que "pueden hacer mucho más en materia de agresiones machistas, empezando por reconocer la necesidad de grupos feministas combativos, reforzarlos y referenciarlos". Rovira ha explicado que en el Ayuntamiento hay "todo un informe de actuaciones" para abordar la violencia machista, pero ha afirmado que, "cuando haces la denuncia, el circuito jurídico y policial es básicamente masculino". La concejal cree que las administraciones públicas, como el Ayuntamiento o los cuerpos de la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra, tienen mucho que decir, pero que "tiene que ser de manera conjunta con las asociaciones que trabajan a pie de calle". En este sentido, ha pedido que se tengan en cuenta las asociaciones feministas y que en las escuelas haya cursos para enseñar "cómo nos tenemos que defender, tanto desde el punto de vista psicológico como físico". 

Mientras relata su experiencia en el artículo, también explica que la policía le dijo que "Gràcia tiene un índice muy bajo de delincuencia, pero es uno de los distritos con más asaltos sexuales en la calle”. Una información que considera que tendrían que conocer los vecinos. "¿Cómo puede ser que las entidades del barrio y los grupos y organizaciones de mujeres no estén al tanto de la situación real de sus calles para poder intervenir?", se pregunta. "Hay que apostar por la autodefensa feminista y entre todas hacer nuestra la noche", concluye Rovira.