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Salud registró 18.353 reclamaciones en 2015 por las listas de espera

El mandato de Boi Ruiz culminó con, al menos, 57.000 quejas por retrasos en la atención sanitaria

Jessica Mouzo
Manifestación en el hospital de Bellvitge de Barcelona en 2014
Manifestación en el hospital de Bellvitge de Barcelona en 2014Massimiliano Minocri

Las extensas listas de espera que acumuló la sanidad catalana en los últimos cinco años han acabado por empapelar de reclamaciones el Departamento de Salud. La institución, en manos del consejero Toni Comín desde el pasado enero, registró 18.353 quejas en 2015 —cuando todavía estaba al mando Boi Ruiz— por retrasos en las listas de espera. Según Salud, estas reclamaciones no son sólo por demoras en operaciones o pruebas diagnósticas, sino también por retrasos en “atención a las urgencias o ingresos hospitalarios”, entre otros.

Las quejas recogidas en 2015, señaló ayer un portavoz del Departamento, no son comparables con las que publicó Salud en años anteriores. Mientras que la cifra de 2015 contempla las quejas por demoras en todos los servicios del sistema sanitario, los datos recogidos entre 2011 y 2014 sólo hacen referencia a reclamaciones por retrasos en intervenciones quirúrgicas y pruebas médicas.

En esos cuatro años, época en la que el gobierno de Artur Mas ejecutó los grandes recortes en el sistema y se alcanzó la cifra récord de 193.879 pacientes en lista de espera, se contabilizaron un total de 39.000 reclamaciones por retrasos en operaciones y pruebas diagnósticas. Sólo entre el Parc Taulí de Sabadell y el hospital de Badalona ya acumulaban el 25% de las quejas. A falta de saber las reclamaciones en los demás servicios sanitarios durante ese período, el mandato de Boi Ruiz culminó con, al menos, 57.000 quejas por retrasos en la atención sanitaria.

Las cifras de las listas de espera

552.100 personas aguardan por una visita al especialista.

161.730 catalanes tienen pendiente someterse a una intervención quirúrgica. La cifra récord se alcanzó en 2011 al sumar 193.879 pacientes en espera.

138.606 usuarios esperan una prueba diagnóstica.

7.820 personas fueron derivadas de sus hospitales de referencia para ser operadas en otros centros. El 53,8% fueron a hospitales privados con afán de lucro.

57.000 reclamaciones son las que acumuló, como mínimo, el ex consejero Boi Ruiz por retrasos en las listas de espera.

20 hospitales superan el plazo máximo estipulado por Ley para visitas al especialista.

Según las entidades sociales, los pacientes han tomado “más concienciación sobre sus derechos” tras la oleada de recortes que sufrió el sistema sanitario. “Siempre que salimos a la calle, la gente nos responde”, apunta Carlos Blach, de la plataforma SAP Muntanya. Su entidad es una de las organizaciones que llevan cinco años apostándose a las puertas de los hospitales —en su caso, Vall d'Hebron— para asesorar a los usuarios sobre cómo reivindicar sus derechos como pacientes. “A través del boca a boca, estas iniciativas se han trasladado a otros territorios”, apunta Miguel Mansergas, portavoz de la Asociación de Vecinos de L'Hospitalet de Llobregat, una de las entidades que puso la parada informativa en el hospital de Bellvitge.

Según el Departamento, que dio ayer la cifra de 2015 en respuesta a una pregunta parlamentaria, “el hecho de presentar una reclamación no presupone un avance subjetivo de la fecha de intervención”, sino que “en alguns casos, una vez valoradas las circunstancias cambiantes del paciente o las propias garantías que establece Salud, se determina la necesidad de ofrecer al reclamante un avance del tiempo de espera”. La experiencia de Mansergas, no obstante, certifica que las reclamaciones sirven para agilizar el proceso. “Son muchos los que reclaman y, al poco tiempo, los llaman y en 15 días están operados”.

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Sobre la firma

Jessica Mouzo
Jessica Mouzo es redactora de sanidad en EL PAÍS. Es licenciada en Periodismo por la Universidade de Santiago de Compostela y Máster de Periodismo BCN-NY de la Universitat de Barcelona.

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