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Ribó acusa a Montoro de pedirle que cierre la empresa de autobuses

Hacienda lo desmiente y dice que solo ha pedido un informe sobre la situación de la compañía deficitaria

El alcalde de Valencia, Joan Ribó, y el primer teniente de alcalde, Joan Calabuig, en un pleno del Ayuntamiento.
El alcalde de Valencia, Joan Ribó, y el primer teniente de alcalde, Joan Calabuig, en un pleno del Ayuntamiento. JOSÉ JORDÁN
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El alcalde de Valencia, Joan Ribó, ha acusado al ministro de Hacienda en funciones, Cristóbal Montoro, de pedirle que cierre la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de acuerdo con la ley de racionalidad y sostenibilidad de la Administración Local, dado que es una empresa en números rojos. "No lo vamos a pemitir" ha dicho el regidor, quien ha recordado que la EMT realiza unos 300.000 viajes diarios.

"La EMT es un elemento fundamental para la ciudad de Valencia", ha dicho al tiempo que ha recalcado que "quien tiene déficit es el señor Montoro". "Que lo arregle él y deje de incordiarnos", ha sentenciado. El regidor valenciano reacciona así una semana después de recibir el escrito de Hacienda, que, según el Consistorio,  pide la supresión de la EMT y del Consell Agrari Municipal por ser entidades deficitarias.

El Ayuntamiento de Valencia ha presentado alegaciones al Gobierno central por medio de una carta que, según ha explicado hoy Ribó  "el Consell Agrari Municipal no está incluido en todas las cláusulas que plantea y la EMT tampoco está incluida, por una serie de mecanismos, concretamente porque no ha habido dos años en los cuales haya estado en pérdidas".

"Parece que el señor Montoro quiera perjudicar, no solo a la ciudad de Valencia, sino a todo el País Valenciano, con sus problemas de financiación", ha manifestado Ribó.

El alcalde ha tranquilizado a los ciudadanos porque "no se va a cerrar la EMT". "Vamos a luchar para defenderla", ha dicho y ha recordado que el servicio de autobuses ha aumentado en dos millones su número de pasajeros en los últimos tiempos.

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"No voy a permitir, por ningún motivo, que se cierre la EMT, porque es un elemento fundamental para la ciudad de Valencia. Si no hubiera EMT, esta ciudad sería un caos a nivel de circulación y una ciudad en la cual las personas con menos recursos no se podrían desplazar",

El alcalde ha destacado que el actual equipo de gobierno "ha bajado el endeudamiento de esta ciudad a niveles de 2005, ha rebajado la época de pago a los proveedores de los 60 días a ocho; y en 2015 ha tenido un superávit importante". "Si el señor Montoro tiene problemas con la Unión Europea por el déficit, que no acuse a la ciudad de Valencia y a los municipios", ha agregado.

El Ministerio de Hacienda destaca que en las cartas remitidas a varios ayuntamientos sobre la situación de entidades públicas locales que se encuentren en situación de desequilibrio financiero lo que se hace es un requerimiento "de información, no de supresión". Además, subraya que existe un plazo para presenta alegaciones que paraliza el procedimiento y que los propios consistorios pueden destinar fondos a las empresas públicas deficitarias, por lo que "en ningún caso" tiene que dejarse de prestar el servicio a los ciudadanos.

Hacienda pide más información

Fuentes del Ministerio de Hacienda desmienten las afirmaciones del alcalde de Valencia. De acuerdo con la Ley de Estabilidad y la Ley de Régimen Local, los ayuntamientos deben remitir al ministerio la contabilidad de las empresas que sean deficitarias durante dos años o más. Una vez compilados esos datos, Hacienda afirma que tan sólo ha remitido al municipio un requerimiento de más información sobre la situación de la empresa. Pero que ese mismo requerimiento contempla la posibilidad de alegaciones.

Una vez emitidas las alegaciones, recuerda Hacienda, se interrumpen todos los plazos para cerrar la empresa deficitaria y las administraciones pueden ir discutiendo sobre el futuro y los planes de negocio del ente. De todos modos, los ayuntamientos saneados y al corriente del pago a proveedores como Valencia siempre pueden trasladar esas pérdidas a sus cuentas y mantener sin problemas la empresa, señalan fuentes del ministerio. “Aquí en Hacienda no tenemos ni la más mínima intención de dejar sin un servicio público a los ciudadanos”, explican.

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