Cataluña, a la cola de la formación de grado medio en Europa

Cataluña está en la cola de Europa en el porcentaje de población con formación de grado medio, aquellos técnicos con educación postobligatoria no superior. Un estudio del Observatorio de Pimec presentado ayer por la patronal de pequeñas y medianas empresas revela que solo un 22,8% de la población activa catalana tiene este tipo de formación. El director del Observatorio, Modest Guinjoan explicó que en pequeños países avanzados la formación en grados medios llega a 45% en países como Suecia o Finlandia, o al 40% en Holanda. En Alemania es del 59,8%.

Guinjoan alertó de que las cifras catalanas indican un desajuste con la realidad del mercado laboral, donde el 36,5% de los puestos de trabajo son acordes a esta formación. Una brecha de 13,7 puntos. Los desequilibrios se repiten también en la formación alta (graduados universitarios): mientras que solo el 23,3% de los puestos de trabajo necesitan ese nivel de conocimientos, un 40% de la población activa lo acredita.

Este panorama explica la situación de sobrecualificación y subocupación del mundo laboral catalán, dijo el experto. De ahí que Antoni Cañete, secretario general de la patronal, pidiera “poner la demanda laboral por delante de la oferta formativa” y reivindicó que la empresa “sea el origen y el destino de cualquier acción de formación profesional”.

La importancia de la formación de grado medio, a través de la FP, por ejemplo, es un discurso repetido muchas veces. De hecho está pendiente completar el despliegue de la ley catalana en ese campo. Cañete aceptó que hay un cambio cultural pendiente para darle más valor a este tipo de preparación, algo en lo que concuerda Guillem Salvans, de la Fundación Bertelsmann. “La FP Dual es una oportunidad de darle valor y también la pueden hacer pymes”, asegura.

Otro tema pendiente es el de las retribuciones salariales y el del modelo productivo catalán. Un 42% de la población activa tiene formación baja, contra el 18,3% de promedio de países pequeños y avanzados europeos. Cañete alerta de que, en muchos casos, el grado medio es visto solo como una vía para llegar a la universidad.