Desalojadas dos fiestas con 78 menores en las que estaban consumiendo alcohol

Dos nuevas fiestas han sido desalojadas estas madrugada por parte de la Policía Municipal de Madrid, tras inspeccionar sendos locales y comprobar que en su interior había menores consumiendo alcohol y tabaco. A lo largo de los últimos meses son numerosos los actos detectados por los agentes locales. En uno de ellos los congregados fueron retenidos incluso contra su voluntad hasta que fueron liberados por la policía.

En uno de los locales de ayer, Los Maitines, situado en el número dos de las calle San Lorenzo, se superaba en 50% el aforo permitido. Los agentes localizaron a 47 menores que celebraban una fiesta de graduación de fin de curso. El cierre del local se encontraba bajado, sin que se pudiera entrar ni salir libremente. Los agentes hallaron alcohol y tabaco en el establecimiento que estaba siendo consumido por los menores.

En el segundo local había siete menores de los 31 asistentes a una fiesta de cumpleaños. Se trataba de un local alquilado como vivienda de temporada. Destacan las deficientes condiciones de seguridad y de higiene.

La policía municipal de Madrid ha alertado de forma reiterada las graves consecuencias que pueden tener este tipo de celebraciones en locales que no reúne las mínimas condiciones de seguridad y de salubridad. La forma de contratarlo es siempre la misma. Se utilizan páginas web en las que se anuncia la ¡celebración de fiestas privadas. Para ello es necesario que un adulto contrate los servicios,. A los promotores les resulta indiferente si los asistentes son menores de edad o adultos. El organizador contrata a varias personas que se encargan de poner las bebidas, recoger las entradas y abrir o cerrar las puertas de acceso.

Las últimas inspecciones realizadas por la policía municipal han revelado que los cierres de los establecimientos suelen estar cerrados, que los locales carecen de salida de emergencia o que estas se encuentran taponadas por cajas de bebidas o sin la señalización adecuada.

A todo ello se une una deficiente salubridad de los establecimientos, ya que en las últimas ocasiones se han topado con locales repletos de basura o los alimentos y las bebidas expuestos sin ningún tipo de higiene. Las instalaciones eléctricas tampoco reúnen los requisitos necesarios y carecen en la mayoría de las ocasiones de las protecciones necesarias para evitar incendios,

Por parte de la policía municipal se ha intensificado la vigilancia de estos establecimientos, sobre todo con vistas al final del curso escolar que es cuando aumenta el número de celebraciones y de festejos con el consiguiente riesgo para los contratantes y, en especial, para los menores.