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Societat Civil edita un vídeo para denunciar “el precio de la disidencia”

La organización compara el proceso independentista catalán con regímenes totalitarios

Carlos Orquín

Societat Civil Catalana considera que Cataluña vive en un clima político comparable al de regímenes totalitarios. La organización contraria a la independencia ha presentado este martes un vídeo documental que pretende denunciar "el precio de la disidencia" a los partidos nacionalistas desde hace 40 años, según ha defendido el exdiputado socialista Joan Ferran. El vídeo contiene testimonios de diputados del PP y Ciudadanos, periodistas y padres que han solicitado el 25% de clases en castellano para sus hijos en escuelas públicas, entre otros.

El realizador Fran Jurado aporta la parte narrativa y el politólogo Martín Alonso la teórica. El vídeo dura 27 minutos e intenta explicar la idea Alonso de que el nacionalismo catalán ha aplicado el concepto de "contramovilización" a sus adversarios políticos. Según Alonso, esta consistiría en el intento de invisibilizar a los contrarios de la independencia a través del control de la prensa —Coll asegura que Pujol llamaba a los periodistas para decirles qué tenían que escribir— y la teoría de la espiral del silencio, es decir, el miedo a llevar la contraria al pensamiento dominante. Los ponentes han puesto como ejemplo los altercados del pasado viernes en la universidad autónoma de Barcelona en el que apareció un grupo de neonazis en un acto de la entidad en el campus.

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Según el vídeo, este fenómeno empezó en Cataluña con el discurso que Jordi Pujol dio en 1984 después de una manifestación de apoyo por el caso Banca Catalana tras ganar las elecciones. Padres que han pedido un 25% de la escolarización de sus hijos en castellano, o Dolores Agenjo, la directora de un colegio que se negó a dar las llaves del centro a la Generalitat para celebrar la consulta del 9-N, narran situaciones que califican de acoso.

Alonso ha explicado que esa situación ha mejorado en los últimos años, pero ha definido el final de la década de los 90 como "los años de plomo". El escritor Félix Ovejero atribuye en el documental al nacionalismo catalán la intención de dividir la opinión pública en una posición maniquea entre los nacionalistas catalanes y españoles, sin atender "a los matices que hay en la sociedad catalana".

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No obstante, en el documental solo intervienen diputados del PP y de Ciudadanos —también Jordi Cañas, que dejó el Parlament por una acusación de fraude fiscal— además de periodistas como Nacho Martín Blanco o Andrea Mármol. Del PSC, solamente Ferran. Según el realizador, no han contactado con miembros de más partidos porque, aunque intentan reflexionar sobre el pluralismo, "en este caso quería poner en valor elementos que forman parte de una narrativa oculta. Se debería intentar entender como un documental de tesis que va a favor de una idea y en este caso es como un artículo de opinión", ha añadido.

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Sobre la firma

Carlos Orquín
Periodista especializado en política, trabajó en la redacción de Barcelona de EL PAÍS y, después, en diferentes proyectos de televisión -en La Sexta, TV3, La2-, y radio en SER Catalunya. Actualmente, concentrado en la comunicación institucional y política, lo que compagina con comer a tiempo completo y escribir a tiempo parcial en El Comidista.

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