_
_
_
_
_

19 detenidos en España de una banda serbia acusada de tres muertes

El cabecilla del grupo mafioso fue identificado en una urbanización de lujo de Lloret de Mar

Oriol Güell
Una de las plantaciones de marihuana identificada por la policía española.
Una de las plantaciones de marihuana identificada por la policía española.

Una amplia operación del Cuerpo Nacional de Policía y las policías serbia y checa, coordinadas por Europol, ha concluido con la detención de 25 personas, 19 de ellas en España, acusadas de formar parte de un grupo criminal dedicado al tráfico de marihuana. Europol vincula a la banda con tres asesinatos, dos de ellos ocurridos en Serbia y otro en la República Checa.

Las investigaciones empezaron hace más de un año, cuando la policía de Serbia informó a la española de que un grupo dedicado al tráfico de drogas con base en Novi Sad (al norte del país) se había trasladado a España para continuar con sus negocios ilegales, entre los que destacan la producción y venta de marihuana a gran escala y los robos con violencia. Uno de los cabecillas de la banda fue identificado el pasado mes de julio en una urbanización de lujo en Lloret de Mar (Girona).

Un total de 25 personas, casi todas ellas de nacionalidad serbia, han sido detenidas en la operación, en la que han intervenido más de 300 agentes de policía de los tres países implicados en las investigaciones. Además de los 19 detenidos en España (17 en las localidades catalanas de Lloret, Blanes y Tordera y otros dos en Sevilla), seis personas más lo han sido en la República Checa.

La policía española ha llevado a cabo más de una decena de registros, en los que se han localizado seis plantaciones de marihuana y han sido intervenidos más de 50.000 euros en efectivo. En la República Checa, las plantaciones identificadas han sido cuatro y el material incautado supera los 30 kilogramos de marihuana, además de 18.500 euros en efectivo.

Según sendas notas hechas públicas por Europol y la policía española, los cultivos de marihuana eran instalados en domicilios situados en zonas poco concurridas de alto poder adquisitivo de Cataluña. El grupo también había entrado en contacto con un traficante marroquí para establecer un nuevo punto de cultivo en Sevilla. La policía considera que con los beneficios obtenidos con la venta de marihuana, la banda pretendía obtener fondos económicos para financiar otras actividades delictivas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_